En la batalla por la paridad de los sexos algunos países han hecho progresos en la reducción de la desigualdad, como en el acceso a los servicios de salud, educación y los servicios financieros, pero a nivel mundial, los hombres todavía tienen aún más oportunidades económicas que las mujeres, según destaca el Fondo Monetario Internacional.

La desigualdad de género está directamente relacionada con la de los ingresos, lo que a su vez puede debilitar la sostenibilidad del crecimiento de una economía. El país con la mayor brecha salarial es Corea del Sur, con una diferencia de 37 puntos porcentuales entre los salarios de hombres y mujeres. En Estados Unidos y Canadá es de 18 puntos porcentuales, mientras que Luxemburgo se ubica en el extremo inferior de la escala, con una brecha salarial de tres puntos porcentuales. El G7, que agrupa a los siete países más ricos del mundo, está comprometido en avanzar en la reducción de su actual brecha, de unos 16 puntos de media.