Cuando se habla de consumo de energía, los ojos se posan por defecto en China o Estados Unidos. Pues bien, según las previsiones de la Agencia Internacional de la Energía, será India la principal responsable del aumento en la demanda de aquí a 2040. Por supuesto, la demanda global seguirá subiendo con alegría –ascenderá un 30%, lo que equivale al consumo de un estado como China, por ejemplo– pero es indudable que el crecimiento no será el mismo que durante los años del boom de los países emergentes.
Llama también la atención el fortísimo declive de la demanda en Europa, asociado a unos estándares más estrictos de eficiencia (produce más con la misma cantidad de energía) y emisiones, y a un peso menor de la industria en general y de la pesada en particular.