Disney ha presentado sus resultados del último trimestre de 2015 con unos datos que, aunque positivos, no han estado a la altura de las expectativas y previsiones de los analistas. La compañía ganó 2.900 millones de dólares (lo que equivale a más de 2.500 millones de euros) en esos cuatro meses, superando los 2.200 millones de dólares que se embolsaron en las mismas fechas el año anterior. Los ingresos alcanzaron los 15.244 millones de dólares, lo que supone un aumento del 14% respecto al mismo periodo en 2014. Así, según ha confirmado su CEO Robert Iger, se trata del décimo trimestre consecutivo en el que Disney crece en doble dígito.
Tras hacer públicos los resultados de la compañía Iger reconoció que “gracias al inmenso éxito de Star Wars hemos alcanzado nuestro récord en un trimestre”. A continuación el CEO expresó que están muy satisfechos con los resultados obtenidos, “que validan nuestra estrategia y nuestra línea de inversión”.
Y es que sí. Los resultados no son malos, pero la realidad es que no han alcanzado las previsiones. Así lo llevan advirtiendo unos meses analistas e inversores, que afirman que los resultados de Disney en 2015 están “maquillados” por el estreno de Star Wars, pero las cuentas se verán resentidas en 2016 y 2017. Sin ir más lejos Morgan Stanley ya rebajó a 90 dólares el precio por acción de la compañía. Además, desde noviembre su capitalización bursátil ha caído un 30%, casi 133.000 millones de euros.