Podemos ha registrado en el Congreso una proposición de ley para que la cuantía a abonar por el impuesto a la banca «en ningún caso» pueda resultar inferior al 50% del beneficio bruto obtenido por la entidad financiera.
La formación quiere rediseñar el impuesto extraordinario sobre el sector financiero que se aprobó en la legislatura pasada porque es «insuficiente para redistribuir las ganancias de la gran banca», el cual grava a un 4,8% los márgenes que las entidades obtienen de los intereses y las comisiones y que recaudó unos 1.200 millones de euros el pasado ejercicio.
En concreto, propone que el impuesto se extienda hasta 2025, con la posibilidad de hacerlo permanente, y se duplique hasta el 10% y que en 2024 y 2025 se complemente, a semejanza de Italia y Lituania, con otro tributo del 75% sobre los márgenes de intereses y comisiones que se sitúen por encima del margen de 2022.
Esto, dice Podemos, serviría para recaudar los fondos extraordinarios obtenidos por los bancos ante el aumento de los tipos de interés. Pero la cuantía a abonar por los bancos no puede resultar inferior «en ningún caso al 50% del beneficio bruto obtenido en el periodo de referencia».
A juicio de Podemos, el impuesto así planteado «cumple los objetivos de efectividad y capacidad de pago» y «no es confiscatorio», porque solo se aplica a los «márgenes excesivos y temporales».
LOS FONDOS OBTENIDOS, PARA VIVIENDA PÚBLICA
El partido liderado por Ione Belarra quiere que los recursos obtenidos con el gravamen a la banca, el energético y a las grandes fortunas (se aprobaron los tres a la vez) vayan destinados a un fondo extraordinario para la construcción de vivienda pública.
Las casas se destinarían al alquiler social temporal y de emergencia en zonas tensionadas, para aquellas personas vulnerables en lista de espera para el acceso a una vivienda de protección oficial.
Podemos ya defendió con anterioridad la idea de reforzar el impuesto a la banca porque lo consideraba «migajas» en comparación con los beneficios que las entidades financieras españolas obtuvieron en 2023.
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, se lo hizo saber al ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en la primera sesión de control del año. Sin embargo, el sucesor de Nadia Calviño recordó la necesidad de que el sector bancario sea solvente para contribuir al crecimiento económico del país.