Las acciones del grupo suizo Temenos, especialista en software para entidades financieras, llegaban a caer más de un 33% este jueves, después de que el inversor bajista Hindenburg Research haya publicado un informe donde acusa a la empresa de manipular sus informes de resultados de graves irregularidades contables, algo que la firma helvética ha rechazado, asegurando que el documento contiene inexactitudes y errores.
La firma bajista, famosa tras sus ataques a Icahn Enterprises (IEP), el grupo indio Grupo Adani o el fabricante de vehículos eléctricos Nikola, ha expresado sus sospechas sobre la posible manipulación de ressultados e irregularidades contables importantes por parte de Temenos.
En su informe, publicado tras una investigación de cuatro meses, en la que Hindenburg entrevistó a varios ex empleados, incluyendo altos directivos de la empresa, la firma bajista asegura que descubrió características de ganancias manipuladas e irregularidades contables importantes.
En este sentido, apunta a evidencias de prácticas como ingresos ida y vuelta, asociaciones ficticias, aplazamientos y contratos retroactivos, una capitalización excesiva de inversiones en I+D aparentemente inexistentes y «otras clásicas señales contables de alerta».
«Estas prácticas contables agresivas parecían ser un secreto a voces entre muchos de los ex empleados con los que hablamos», afirma la firma inversora.
Asimismo, el documento señala que, si bien los accionistas de Temenos incluyen gerentes institucionales de renombre como Baillie Gifford, Fundsmith y Fidelity, los ejecutivos de Temenos han vendido acciones constantemente por unos 1.100 millones de dólares (1.026 millones de euros) en la última década, mientras que han comprado sólo 26 millones de dólares (24 millones de euros) en acciones durante el mismo período.
En el documento, Hindenburg Research recuerda que debe asumirse que la firma, posiblemente junto con o a través de sus miembros, socios, afiliados, empleados y/o consultores, junto con sus clientes y/o inversores «tiene una posición corta» en las acciones cubiertas por el informe y, por lo tanto, «puede obtener ganancias significativas en el caso de que el precio de cualquier acción cubierta en este documento disminuya».
Las acciones de Temenos, que llegaron a caer un 33,88% en la Bolsa de Zurich, han concluido la sesión con una bajada del 28,19%, lo que equivale a la pérdida de unos 1.866 millones de francos suizos (1.964 millones de euros) de capitalización.
En respuesta a las acusaciones de Hindenburg Research, el consejo de administración de Temenos ha afirmado que «refuta fundamentalmente el informe publicado», asegurando que contiene «inexactitudes fácticas y errores analíticos, junto con acusaciones falsas y engañosas» que tienen como objetivo afectar negativamente el precio de las acciones de la compañía.
Asimismo, critica que la firma no contactó con la empresa con anticipación necesaria para realizar ningún comentario sobre el informe y subraya que Temenos confía en la solidez de su negocio, desempeño financiero y posición de efectivo, respecto de los que publicará sus cuentas auditadas el próximo 19 de febrero, después del cierre del mercado.