Los consumidores online europeos (e-shoppers) vuelven a los hábitos de compra del pasado para adaptarse a las dificultades económicas, según refleja el E-shopper barometer de Geopost, grupo al que pertenece la empresa de transporte urgente Seur.
El barómetro, centrado en el comportamiento y las tendencias de más de 24.000 consumidores electrónicos procedentes de 22 países, señala que el precio y la información detallada sobre las características del producto, la facilidad en la compra y en la devolución, así como la puntualidad y la flexibilidad en la entrega son los criterios más relevantes a la hora de comprar por Internet.
A juicio de Geopost, estas preferencias explican, en gran medida, el creciente éxito de las soluciones Out of Home (OOH) y de las plataformas C2C (Consumer to Consumer) en 2023, en línea con una tendencia que se ha observado desde hace algunos años.
Además, el informe confirma nuevas tendencias a la hora de buscar inspiración e información sobre los productos, como el incremento del uso de las redes sociales.
En general, la dinámica de 2023 apunta a una estabilización del crecimiento empresarial de los últimos años con un ligero descenso en el número total de consumidores on line y una estabilización en el número de e-shoppers habituales, aquellos que compran, al menos, una categoría de productos al mes por Internet.
COMPRA ONLINE PARA AHORRAR
La directora de Investigación de Mercado del Grupo Geopost, Carmen Cureu, ha afirmado que la edición del E-shopper barometer de 2023 de Geopost señala una tendencia «clara», que «los e-shoppers habituales en Europa siguen comprometidos con el e-commerce».
«En un entorno económico incierto comprar online se ve como una forma de ahorrar y los consumidores vuelven a sus anteriores hábitos de compra: el precio, la facilidad en la compra y en la devolución, la puntualidad y la flexibilidad en la entrega», ha sostenido.
PRINCIPALES TENDENCIAS
El informe detalla que los e-shoppers han vuelto a sus hábitos de compra del pasado para adaptarse a las dificultades económicas y destaca que en los últimos años, la comodidad y la accesibilidad que ofrece el comercio electrónico se han convertido en una «parte fundamental» de las compras por Internet.
La versatilidad de las tiendas online se ha extendido más allá de los bienes no esenciales y ahora los consumidores electrónicos recurren frecuentemente a plataformas digitales para adquirir artículos esenciales, especialmente en las categorías de alimentos y productos relacionados con la salud, revela el análisis
Esta evolución en el comportamiento del consumidor se desarrolla en un contexto de dificultad económica para los hogares «abrumados por incertidumbres en varios países europeos y una inflación persistente», apunta.
En segundo lugar, el estudio revela que el e-commerce está experimentando ligeros ajustes en 2023. Tras un crecimiento acelerado, la proporción de consumidores online en Europa ha disminuido ligeramente durante los últimos dos años (-1 punto en 2022 y -1 punto en 2023), mientras que la proporción de e-shoppers habituales se mantiene estable.
El análisis asegura que los compradores online siguen profundamente comprometidos con el comercio electrónico, ya que lo consideran como «una manera de reducir el estrés de las compras en tiendas físicas y de ahorrar tiempo».
Además, los e-shoppers habituales «son muy sensibles al precio». El 65% considera que las compras online son una manera de ahorrar dinero, incluso más que antes. Además, aunque las entregas sostenibles siguen siendo importantes, los e-shoppers habituales están menos dispuestos a pagar más por productos sostenibles en 2023.
GANAN FUERZA LAS SOLUCIONES ‘OUT OF HOME’
La entrega a través de soluciones Out of Home (OOH) sigue ganando fuerza, expone el estudio, que señala que aunque la entrega a domicilio es la opción preferida de los e-shoppers, el uso de puntos de venta y de taquillas sigue aumentando en 2023.
El uso de plataformas C2C y la compra a través de redes sociales sigue siendo elevado. Siete de cada diez consumidores online habituales compran o venden en plataformas C2C y un tercio afirma que ha aumentado sus compras de productos de segunda mano.
Por otro lado, en 2023, más e-shoppers habituales venden en estas plataformas, principalmente para liberar espacio, porque tienen productos que no utilizan y para ganar dinero extra.
Las redes sociales también se utilizan en gran medida con fines de compra, concretamente por 7 de cada 10 e-shoppers habituales. Principalmente, las utilizan para obtener inspiración o información, y un 48% de los e-shoppers habituales las usa para realizar una compra directa.
Por último, el barómetro apunta a que las percepciones sobre las compras online y la experiencia de entrega se estabilizan en 2023. Tras dos años de declive en 2021 y 2022, la percepción de los e-shoppers habituales sobre la gestión de la entrega en su última compra online se estabiliza en 2023. Sin embargo, la percepción general no ha vuelto a los niveles observados en el pasado.
Los e-shoppers insatisfechos se quejan principalmente de la falta de transparencia del producto y los retrasos en la entrega. En este contexto, la familiaridad con la empresa de entrega sigue siendo crítica.
EL COMERCIO ELECTRÓNICO SE ESTABILIZA
A diferencia de la tendencia descendente del e-commerce en Europa, el barómetro de Geopost expone que la situación en España se mantiene estable en 2023.
Los e-shoppers habituales, que reciben una media de 4,7 pedidos al mes, continúan adquiriendo productos en las mismas categorías de moda, belleza, salud y calzado, aunque con un descenso de la compra de libros, alimentos y tecnología en comparación con el periodo de la pandemia. Además, la percepción del comercio electrónico se ha estabilizado después de la caída registrada el año anterior.
La sensibilidad al precio es una constante entre los e-shoppers habituales españoles y se mantiene en niveles similares a los de 2022 a pesar de la alta inflación. Dos tercios consideran el precio como el factor determinante en sus decisiones de compra y un 61% está constantemente en busca de descuentos y ofertas, indican los datos.
El uso de plataformas C2C y las compras a través de redes sociales continúa siendo elevado en España, con alrededor del 70% de los e-shoppers habituales participando en estas plataformas tanto para comprar como para vender.
A pesar de que los españoles utilizan estas plataformas con menos frecuencia que sus homólogos europeos, la preferencia por la entrega física en compras a particulares sigue siendo mayor en España, aunque la selección de empresas de reparto a través de sitios web o aplicaciones está ganando popularidad.
El barómetro expone que la percepción sobre las compras online y la experiencia de entrega se mantiene estable en 2023. La facilidad de su última compra online es muy destacada por los e-shoppers españoles, así como la creciente importancia de las empresas de transporte en la experiencia de entrega.
Aunque solo el 11% ha devuelto su última compra, la satisfacción con el proceso de devolución es mayor en comparación con sus homólogos europeos. Sin embargo, persisten dificultades relacionadas con el proceso de devolución en sí.
Por último, expone que las soluciones Out of Home (OOH), como las tiendas de las empresas de transporte y el uso de taquillas, están ganando terreno en España.
Según señala, los consumidores electrónicos aficionados, quienes representan el 15% del total, comparten una percepción positiva sobre la experiencia de compra y sobre la entrega/devolución online, al tiempo que subrayan la facilidad y comodidad de estas actividades.