Los nuevos pedidos de las fábricas de Alemania registraron el pasado mes de noviembre un incremento mensual del 0,3%, después de la caída del 3,8% de octubre, lo que supone un repunte sustancialmente más débil del 1,1% esperado por el consenso del mercado y alienta los temores de que la mayor economía europea entró en recesión al final de 2023.
De hecho, según la Oficina Federal de Estadística (Destatis), al excluir el impacto de los pedidos a gran escala, los nuevos encargos en el mes de noviembre disminuyeron un 0,6% en noviembre en comparación con el mes anterior.
En noviembre los nuevos pedidos aumentaron con respecto al mes anterior tanto en el sector de bienes de equipo (+0,8%) como en el sector de bienes de consumo (+1,1%), mientras que el sector de bienes intermedios registró una caída del 0,4%.
Los pedidos internos aumentaron un 1,4%, mientras que los encargos desde el extranjero cayeron un 0,4%, incluyendo una disminución del 1,9% de los nuevos pedidos de la zona del euro, frente al incremento del 0,6% de los procedentes del resto del mundo.
En comparación con noviembre de 2022, el dato registró un retroceso del 4,4%, después de la caída interanual del 7,3% observada en octubre.