El consorcio SIS, conformado en un 51% por Fininc y en un 49% por Sacyr, ha recibido este jueves la autorización para la puesta en servicio del último tramo de la autopista de peaje Pedemontana-Veneta, cuya inversión asciende a 2.600 millones de euros.
De esta manera, el túnel de Malo, de seis kilómetros de longitud, quedará abierto oficialmente al tráfico este mismo viernes a partir de las 18.00 horas.
El vicepresidente y ministro de Infraestructuras y Transporte italiano, Matteo Salvini, ha visitado este jueves el túnel de Malo, según ha informado la compañía española de infraestructuras en un comunicado.
La concesionaria SIS es la encargada del diseño, construcción, financiación, operación y mantenimiento de la autopista durante un periodo de 39 años desde la finalización de la construcción.
El proyecto ha requerido la construcción de 162 kilómetros: 94 de ellos corresponden a la vía principal, que comunica 38 municipios y el área industrial de Vicenza y Treviso, y 68 kilómetros a accesos secundarios.
Asimismo, cuenta con dos túneles, el de Malo, de 6 kilómetros de longitud, y el de S.Urbano, de 1,5 kilómetros, así como ocho viaductos, y forma parte de la European TEN-T, situada entre las autopistas A4 y A27 y atravesando la Región del Veneto por Vicenza y Treviso.
El tráfico inicialmente estimado para toda la autopista es de 27.000 vehículos diarios, de los que el 20% se prevé que sea tráfico pesado.
La autopista tiene un bajo impacto ambiental, ya que el 70% del trazado discurre en trinchera o bajo túnel, sin producir impacto visual ni ruido y sin constituir una barrera, ya que no tiene impacto para todos los viales, servicios, canales y zonas de fauna preexistentes.
Sacyr defiende que el proyecto está diseñado y construido con las últimas innovaciones en seguridad, tecnología y sostenibilidad, entre las que destaca el sistema de iluminación Iohnic de Sacyr y el pavimento fonoabsorbente, anti acuaplaning y catalítico (atrae las partículas contaminantes y en combinación con la luz oxida los nitratos y carbonatos).
Además, los muros de las trincheras del trazado tienen distinto color según el municipio que se atraviesa que permite orientarse a los usuarios. Pedemontana cuenta con barreras antirruido transparentes para no mermar la visibilidad ni la luz de la plataforma.