La vicepresidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Montserrat Martínez Parera, ha señalado este viernes la importancia de disponer de unas «métricas sólidas» que faciliten el seguimiento y la trazabilidad de las inversiones de impacto (que abordan problemas ambientales y sociales) para que den confianza a los inversores.
En una jornada organizada por IE University e Impact Bridge sobre la inversión de impacto, la dirigente del supervisor bursátil español ha remarcado que esas métricas deben contar con verificadores externos de calidad, que aumenten su credibilidad y fiabilidad.
El volumen de activos gestionados en inversión de impacto en España aumentó en 2022 un 58% con respecto a 2021, hasta situarse en los 1.208 millones de euros, según un estudio divulgado por SpainNAB a principios de mes.
El director general de esta entidad, José Luis Ruiz de Munain, ha reivindicado en la ponencia la colaboración público-privada que se está traduciendo en, por ejemplo, la creación del Fondo de Impacto Social (FIS) de 400 millones de euros, que será gestionado por Cofides.
Con todo, Ruiz de Muniain también ha señalado retos pendientes como el establecimiento de un «marco regulatorio favorable», así como promover la educación y la colaboración entre los actores
involucrados.
A propósito del mencionado FIS, el presidente de Cofides, José Luis Curbelo, ha apuntado que su objetivo es dinamizar el ecosistema nacional de inversión de impacto para resolver retos sociales y medioambientales, como la integración territorial y social, la reducción de la desigualdad o la consolidación del estado de bienestar mediante el fortalecimiento de la economía y las empresas con propósito social.
De igual manera ha destacado su «efecto catalizador» para atraer a los inversores privados a este segmento de inversión.
En una línea similar, el presidente del ICO -entidad que en su plan estratégico figura el objetivo de que el 40% de la nueva financiación sea sostenible-, José Carlos García de Quevedo, ha aducido que como organismo público tienen dos retos en materia sostenible: ejercer un papel activo en la financiación y, además, involucrar a todas las empresas, especialmente las de menor tamaño.
Asimismo, ha destacado la labor que realizan desde la gestora Axis -participada en su totalidad a través del ICO- a través de sus cuatro fondos.
Finalmente, el representante del Fondo Europeo de Inversiones (FEI) para España y Portugal, Christian López-Baillo, ha puesto el foco en que los inversores son «cada vez más exigentes» con relación a los criterios ESG (ambientales, sostenibles y de buen gobierno) y tienen la oportunidad de convertirse en auténticos catalizadores para el desarrollo de la inversión de impacto en nuestro país.
López-Baillo ha asegurado que, si bien el sector es aún incipiente, estos proyectos captan cada vez más interés en vista del incremento de los volúmenes de bonos sociales, de los fondos de impacto social y los fondos de deuda impacto.