El Ibex 35 ha iniciado la sesión de este viernes, la última de la semana, con una caída de casi el 0,9%, lo que ha llevado al selectivo a perder la cota de los 9.100 enteros, hasta situarse en los 9.065,63 puntos, tras una semana marcada por el conflicto entre Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), que ha impulsado al alza el precio del petróleo.
El parqué madrileño ampliaba su caída a más del 1% en torno a las 9.15 horas y luchaba por mantener incluso la cota de los 9.000 enteros.
Los inversores pondrán un oído durante esta sesión bursátil a las declaraciones de Elizabeth McCaul, del Banco Central Europeo (BCE), que asiste este viernes a un acto en Roma (Italia).
En los primeros compases de esta sesión, el Ibex 35 se teñía de ‘rojo’, sin subidas y con todos los valores en negativo, destacando como ‘farolillos rojos’ Grifols (-2,8%), Telefónica (-2,16%) y ArcelorMittal (-1,71%).
Las principales Bolsas europeas también abrían este viernes con signo negativo: del 1,08% para Francfort, del 1% para París, del 0,8% para Milán y del 0,43% para Londres.
En la sesión de este viernes habrá vencimientos mensuales de derivados, lo que puede alterar el comportamiento de algunos mercados, entre ellos el español.
En la apertura del mercado bursátil, el precio del barril de petróleo de calidad Brent, referencia para el Viejo Continente, se situaba por encima de los 93 dólares, un 0,7% más, mientras que el de Texas subía un 0,87%, hasta los 89,14 dólares, ambos afectados por la escalada de las tensiones en Oriente Próximo tras la guerra abierta entre Hamás e Israel, así como la situación en Irán, además de las presiones relacionadas con el conflicto en Ucrania y el recorte del suministro de Rusia y Arabia Saudí.
En concreto, el precio del barril de crudo, tanto en su variedad Brent como West Texas Intermediate, repuntaba este viernes hasta niveles máximos desde finales de septiembre ante la incertidumbre sobre la situación en Oriente Próximo.
En el mercado de las divisas, la cotización del euro frente al dólar se colocaba en 1,0572 ‘billetes verdes’, en tanto que la prima de riesgo española rondaba los 112,7 puntos básicos, con el interés exigido al bono a 10 años en el 4,011%.