La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) advierte de las malas perspectivas para la uva pasa en Málaga, concretamente para los productores de la comarca de la Axarquía.
Los cálculos realizados por los técnicos y agricultores de esta asociación estiman que la cosecha de uva pasa se reducirá hasta el 30% de un año normal.
El secretario de UPA Málaga, Francisco Moscoso, considera que los productores no llegarán ni a llenar un pasero y medio en sus explotaciones, lo que conllevará unas cuantiosas pérdidas económicas porque los costes de producción se mantienen altos y los precios que cobran en origen no hacen sostenible el cultivo.
«El año pasado ya sufrimos un recorte productivo de un 60 por ciento con respecto a 2021. Entonces, un agricultor que tenía cinco paseros, como mucho pudo llenar tres, y con suerte. Este año si puede llenar 1,5 será de milagro», afirma.
UPA califica la situación como «muy alarmante» debido a la falta de precipitaciones y a la extrema sequía que se ceba con la comarca de la Axarquía, la principal productora de uva pasa de Málaga.
«Los productores no van a poder soportar la continuidad de sus explotaciones, porque los precios que cobran en origen no hacen sostenible el cultivo, ya que los costes de producción se mantienen muy altos. La escasa cosecha que tendremos va a hacer que muchos agricultores se planteen continuar con unas infraestructuras que cada vez se encuentran más vacías», señala Moscoso.
Y es que, a pesar de que haya muy baja producción, el secretario general de UPA Málaga cree que los precios en origen que cobran los agricultores no les permitirán cubrir los costes de producción. De ahí que vuelva a reclamar a las administraciones ayudas directas.
«La Axarquía vive de la uva pasa, del mango y del aguacate. El olivar está prácticamente muerto. Hay zonas en las que no se ve ni una sola aceituna en los árboles. El mango y el aguacate están francamente mal porque hay una escasez de agua brutal y no se puede regar. Y la uva pasa va por el mismo camino. No podemos aguantar más», señala.
Añade que la situación no es sólo preocupante, «es dramática porque las familias viven de esto y ven cómo año tras año tienen que estar poniendo dinero a sus explotaciones. Así no se puede seguir. Por eso es necesario que las administraciones sean conscientes de la realidad que atravesamos y nos ayuden para seguir viviendo de nuestros cultivos».
Además, el secretario general de UPA Málaga insiste en la petición a la Junta de Andalucía de aguas regeneradas para el regadío. «La consejera habla mucho de la apuesta de su Gobierno por el regadío, pero la realidad es que siguen sin ponerse en marcha proyectos de aguas regeneradas en los municipios», critica.
También considera que no se puede más tiempo «para aprovechar unas aguas que directamente se están vertiendo a los ríos y al mar y que se pierden. Ya es hora de que actúen con responsabilidad para facilitar a los agricultores un recurso que es muy necesario y que tienen al alcance de sus manos. La Consejería debe agilizar los trámites y la aprobación de riegos con aguas residuales en toda la comarca de la Axarquía», concluye.