Economía

Alcalá Oliva busca los mercados del sudeste asiático para seguir creciendo en el continente oriental

La empresa familiar de Alcalá la Real (Jaén) Alcalá Oliva, dedicada a la comercialización y al envasado de aceite de oliva virgen extra, vinagres, aceites aromatizados y vinagretas, está planeando abrirse a los mercados del sudeste asiático para seguir creciendo en el continente oriental.

Su principal mercado de exportación es Asia, con Japón a la cabeza, Corea del Sur y Taiwán. «Nuestro plan a medio plazo es la consolidación en los mercados asiáticos y la apertura de todo el sudeste asiático», para lo que están contando con agendas comerciales organizadas por Andalucía Trade, tal y como ha explicado la ‘export manager’ de la firma, Ángela Pérez.

Para ello, la compañía ha lanzado un nuevo producto, un aceite de oliva aromatizado al ajo, así como un nuevo pack de aceites aromatizados en un estuche con unas botellas «que está teniendo una buena aceptación en los mercados de exportación» y que han llamado ‘AOVE and Friends’. Además, para seguir creciendo, han invertido en una nueva línea de producción de monodosis, que les va a permitir utilizar unos materiales más sostenibles.

En su trayectoria internacional, Alcalá Oliva ha contado con el apoyo de la Junta de Andalucía, a través de Andalucía Trade. «El valor que aporta a través de los servicios y programas que ofrece es realmente útil, independientemente de la fase en la que uno se encuentre en ese proyecto de exportación», ha dicho la empresaria, que asegura haber utilizado «desde programas de consultoría, que siempre han aportado valor, hasta las comunes, que suelen ser la asistencia a ferias y misiones comerciales».

Alcalá Oliva, con capacidad de producir medio millón de kilos de aceite de oliva virgen extra al año, fue fundada en 1977 por su Santiago Pérez, a partir de la compra de un molino de aceite. A partir de ahí, «reforma y renueva todos los sistemas de producción y se inicia en el envasado, que hoy en día es nuestra actividad principal. Todo, con el objetivo de darle valor añadido al producto a granel», ha dicho Ángela Pérez, hija del fundador.

En la actualidad la empresa cuenta con dos marcas en el mercado. Minioliva es la más representativa de la empresa y da nombre a su formato monodosis. «Es nuestro lado más innovador, más fresco y atrevido, aportando calidad, valor, conveniencia y variedad en una sola dosis», ha indicado la directiva de la empresa.

Por otro lado, cuentan con la marca Alcalá Oliva, más ligada a su origen, a su tradición, con la que envasan aceite de oliva virgen extra en «una amplia variedad de formatos para las necesidades y gustos de todos los consumidores».

En el año 2009 la empresa inició desde Alcalá la Real su trayectoria en el exterior. «Alcalá Oliva es una empresa con una clara vocación internacional. Actualmente, más del 70% de nuestra facturación proviene de mercados internacionales», ha apuntado Ángela Pérez.