Apag Extremadura Asaja ha exigido a la Junta de Extremadura y al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ayudas para las producciones excluidas de las anteriores convocatorias, como los cultivos permanentes.
De este modo, la organización agraria ha recordado que, tanto en el Decreto Ley 3/2023 publicado el pasado 22 de mayo en Extremadura, como en el Real Decreto Ley Nacional, quedaron excluidas de ayudas importantes los cultivos permanentes, como el olivar y la vid.
«Nuestras viñas y olivares vienen padeciendo, igual que todo el sector agroganadero, las graves consecuencias de la guerra de Ucrania o la subida de los insumos en todas nuestras necesidades (fertilizantes, fitosanitarios, gasóleo, etc.)», ha explicado Apag Extremadura Asaja.
De este modo, en nota de prensa, Apag ha indicado que este año ha sido «la peor campaña conocida de los últimos años» en cuanto a la producción del olivar en la mayoría de las zonas de Extremadura y, «prácticamente, sin cosecha» en el caso de los olivares tradicionales.
Así, ha expuesto que el año vinícola atraviesa una «complicada situación» con producciones aceptables, pero con unos «precios de ruina» y acogiéndose a medidas de regulación del mercado, como la cosecha en verde y la destilación de crisis.
Además, la producción vinícola se encuentra a las puertas de una campaña con daños por las distintas olas de calor, que «repercutirá en una temporada difícil y costosa para los viticultores».
«Ante esta complicada situación exigimos a nuestras administraciones, tanto regional como nacional, que ofrezca respuestas necesarias para dar viabilidad a las explotaciones de cultivos permanentes», ha recalcado la organización agraria.
Por ello, ha recalcado que «es el momento» de ayudar a los viticultores, como ha sucedido en Andalucía con un presupuesto de 10 millones de euros que garanticen una ayuda de al menos 20.000 euros por explotación.