El deterioro de la actividad manufacturera de la zona euro ha acelerado en mayo su ritmo de deterioro, según el índice de gerentes de compra (PMI), que ha caído hasta los 44,8 puntos desde los 45,8 del mes anterior, lo que representa su lectura más baja en 36 meses, según S&P Global y Hamburg Commercial Bank.
En el mes de mayo, los volúmenes de producción de las fábricas de la zona euro cayeron al ritmo más rápido desde noviembre de 2022, lo que refleja un creciente lastre de la demanda, ya que los nuevos pedidos bajaron al mayor ritmo en seis meses, lo que permitió que los pedidos pendientes disminuyeran con fuerza.
De su lado, los niveles de empleo en el sector manufacturero aumentaron en mayo por vigésimo octavo mes consecutivo, aunque la última tasa de creación de empleo ha sido la más lenta de esta secuencia de crecimiento.
Entre los ocho países de la zona euro cubiertos por el estudio, que representan alrededor del 89% de la actividad manufacturera de toda la región, únicamente Grecia (51,5) registró una expansión de la actividad, mientras que en el resto de países, con la excepción de Francia, el ritmo de deterioro empeoró respecto del registrado en abril.
«La disminución de los nuevos pedidos nacionales y extranjeros indica que es probable que la debilidad de la producción persista durante algunos meses más», ha advertido Cyrus de la Rubia, economista jefe de Hamburg Commercial Bank.