Las 1.000 empresas exportadoras españolas más grandes realizan el 67% de las exportaciones totales de España y sólo 100 llevan a cabo casi el 38% del total, de acuerdo con un estudio elaborado por el Club de Exportadores e Inversores Españoles a partir de los datos de Aduanas de la Agencia Tributaria.
El estudio, que analiza el perfil de los exportadores españoles de bienes, concluye, por tanto, que el peso de las grandes empresas exportadoras en el valor de las exportaciones agregadas nacionales es «muy elevado y estable» a lo largo del tiempo.
Así, estas proporciones se han mantenido inalteradas durante los últimos 20 años, y aunque existe una cierta rotación de empresas en los puestos de mayor volumen de exportación, es baja.
Concretamente, hay 365 empresas que han concentrado el 45% aproximadamente de las exportaciones totales de bienes en el periodo 1997-2021 y el 47% del crecimiento de las exportaciones en los últimos 20 años se debe a los 100 mayores exportadores.
Por ello, el estudio, que destaca la aportación «positiva y significativa» de estas grandes empresas al crecimiento de las ventas exteriores, asegura que España perdería la ventaja comparativa en el 45% de las exportaciones si el principal exportador de cada sector desapareciese.
EL NÚMERO DE EXPORTADORES SE MULTIPLICA POR CUATRO
El estudio también revela que el número de exportadores se ha multiplicado por 4 en los últimos 25 años, alcanzando 235.000, aunque la inmensa mayoría exportan volúmenes muy reducidos. Actualmente solo 52.000 empresas exportan anualmente más de 100.000 euros.
Por todo ello, el Club de Exportadores e Inversores Españoles ha pedido al Gobierno el diseño de políticas económicas que favorezcan el crecimiento sostenido en el tiempo de las empresas que pueden lograr volúmenes significativos de exportaciones.
En un comunicado, ha apostado por estudiar actuaciones de carácter transversal que promuevan fusiones o que eliminen barreras y estimulen el crecimiento con incentivos de carácter fiscal, laboral, de cobertura de riesgos, entre otras medidas.
Para el Club de Exportadores, estas grandes empresas exportadoras generan, además, ventajas competitivas internacionales al país y al ecosistema productivo y exportador de las regiones donde están afincadas.
Por ello, el estudio señala que, junto con las políticas que promueven que las pequeñas y medianas empresas se inicien en la exportación con el objetivo de que algunas alcancen grandes volúmenes de exportación, también es necesario diseñar actuaciones específicas enfocadas a la captación de grandes empresas internacionales que desarrollen su actividad exportadora desde España.
En este sentido, los autores aseguran que la inversión extranjera es un gran impulso a la exportación. A corto plazo, aconsejan también la puesta en marcha de actuaciones que proporcionen estabilidad a las empresas de mayor dimensión, generen el contexto adecuado para que se produzcan los efectos de arrastre (tanto en empresas de bienes como de servicios) y se promueva la diversificación del tejido empresarial exportador.
«Pequeñas modificaciones de la política económica que afecten el comportamiento de las empresas de mayor dimensión pueden tener efectos importantes, mientras que políticas más extensas con impacto sobre muchas pequeñas empresas pueden tener menos efectos agregados si ninguna de estas empresas pequeñas consigue alcanzar tamaños elevados», señalan los autores del estudio.