El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha tildado de «mezquino» que Ferrovial traslade su sede social de España a Países Bajos, con lo que lanza «un mensaje político», cuando «apenas paga impuesto de sociedades».
«Hoy sale –publicado– que Ferrovial no ha pagado impuesto de sociedades. Están queriendo montar un escándalo con el riesgo de que si se tocan impuestos habrá una huída de empresas. No hay ningún infierno fiscal en España», ha remarcado a preguntas de los medios antes de participar en un encuentro con trabajadoras del sector de limpieza.
A su juicio «es mezquino» que empresas como Ferrovial quieran que a «España la sostenga el español medio y ha vuelto a negar que haya huída de empresas», pues la inversión extranjera se está radicando de «forma importante al calor de los fondos europeos».
Por ello, ha criticado que los grandes grupos eludan impuestos de «mil formas» y que en Europa haya «auténticos sumideros fiscales», una situación que podría corregirse condicionando las ayudas y las licitaciones públicas de estas empresas, y salvaguardando el compromiso de responsabilidad social.
«Se trata de empresas que llevan 70 años nutriéndose de recursos públicos. Son atrapa recursos, se han acogido a los ERTE, hay que regular y condicionar cualquier tipo de ayuda a unos mínimos estándares de corresponsabilidad social», ha remarcado.
Otra de las propuestas del líder de CCOO pasa por «establecer un impuesto de sociedades del 15 o 20 por ciento sobre beneficio contable real», sin que estas empresas «puedan eludir el pago de impuestos».