La petrolera estatal italiana Eni se anotó un beneficio neto atribuido récord de 13.810 millones de euros en el conjunto de 2022, lo que supone más que duplicar el resultado de 5.821 millones anotado por la compañía en el ejercicio anterior.
La compañía señaló que su resultado en 2022 fue impulsado por un mejor rendimiento subyacente, parcialmente compensado por menores atípicos, principalmente debido a la evaluación del inventario.
«La compañía logró excelentes resultados financieros y operativos mientras contribuía a la estabilidad del suministro de energía a Italia y Europa y avanzaba en sus planes de descarbonización», declaró el consejero delegado de Eni, Claudio Descalzi.
En este sentido, el ejecutivo destacó que en 2022 la empresa pudo finalizar acuerdos para reemplazar completamente el gas ruso para 2025, aprovechando sus sólidas relaciones con los países productores y el enfoque de desarrollo acelerado para aumentar los volúmenes de Argelia, Egipto, Mozambique, Congo y Catar.
«Si bien las condiciones del mercado fueron claramente favorables, nuestros resultados financieros de 2022 se vieron respaldados por la disciplina de costes y capital, el desempeño operativo y la gestión eficaz de riesgos de la volatilidad de los precios y la escasez de suministro», añadió.
La cifra de negocio de Eni en el conjunto del ejercicio alcanzó los 133.412 millones de euros, un 71,5% más que el año anterior, incluyendo un incremento del 16,5% entre los meses de octubre y diciembre, hasta 31.540 millones.
Sin embargo, en el cuarto trimestre de 2022, el beneficio neto atribuido de la petrolera transalpina disminuyó un 84,3%, hasta 550 millones de euros, como consecuencia del impacto adverso de ajustes a valor razonable de derivados de materias primas a valor razonable de 1.100 millones de euros, así como por el deterioro de activos y contribuciones fiscales.