Schindler se anotó en el conjunto de 2022 unos beneficios netos atribuidos de 610 millones de francos suizos (618,1 millones de euros), lo que se traduce en una contracción del 26,3% respecto a las ganancias de 828 millones de francos suizos (839 millones de euros) de 2021, según ha informado la compañía suiza de ascensores y escaleras mecánicas.
En cuanto a los ingresos, estos se situaron en 11.346 millones de francos suizos (11.497 millones de euros), y suponen un aumento del 1% comparado con el volumen de negocio de 11.236 millones de francos suizos (11.385 millones de euros) del año previo.
Los costes materiales, de personal, por depreciación y amortización, y otros gastos varios ascendieron en 2022 a 10.442 millones de francos suizos (10.580 millones de euros), un 3,7% más. La proporción de gastos respecto a los ingresos totales aumentó al 92%, mientras que, doce meses atrás, estos supusieron el 89,6%.
Solo en el cuarto trimestre del ejercicio, el beneficio neto alcanzó 178 millones de francos suizos (180,4 millones de euros), frente al saldo positivo de 192 millones de francos suizos (194,6 millones de euros) de un año antes, un 7,3% menos interanual.
Por su parte, los ingresos trimestrales fueron de 3.036 millones de francos suizos (3.076 millones de euros), lo que equivale a un alza del 2,8% comparado con la facturación de 2.954 millones de francos suizos (2.993 millones de euros) de 2021.
«A lo largo de 2022, nos hemos concentrado en resolver nuestros problemas pendientes y en adaptar nuestro negocio a unas condiciones de mercado cambiantes», ha señalado el presidente y consejero delegado de Schindler, Silvio Napoli.
Asimismo, el Consejo de Dirección de la compañía propondrá un dividendo de cuatro francos suizos (4,05 euros) por acción y certificado de participación en la Junta de Accionistas del 28 de marzo.
De cara al 2023, Schindler anticipa una caída en el número de instalaciones por la ralentización de la economía. Sin embargo, prevé que mejore el mercado de servicios y de modernizaciones. Ante esto, la firma suiza afirma que espera un crecimiento de los ingresos «bajo y de un solo dígito» y, también, que «continuará centrada en mejorar su eficiencia y la resiliencia de la cadena de suministros».