El presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, ha cuestionado este martes que el acuerdo para la segunda pata de la reforma del sistema de pensiones vaya «en la buena dirección», al acumular un retraso de casi dos meses desde la fecha prevista para el cumplimiento de ese hito con Bruselas, el pasado 31 de diciembre.
Amor ha participado este martes en un desayuno de Nueva Economía Fórum, donde ha señalado que el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, sigue postergando la fecha. Tras superar ese 31 de diciembre, el titular de la Seguridad Social aseguró que se cerraría antes de concluir febrero y este lunes, en Bruselas, apuntó a Semana Santa como fecha probable.
«Veo muy complicado, a día de hoy, un acuerdo en el ámbito político y en el social. Escrivá se ha reunido en dos ocasiones en el último mes con el comisario europeo (de Economía, Paolo Gentiloni). Supongo que estarán viendo mecanismos para poder cumplir el hito y que no se quede esa transferencia de 10.000 millones sin recibirse», ha comentado el presidente de ATA.
Las conversaciones formales entre la Seguridad Social y los agentes sociales se encuentran estancadas por las discrepancias con la principal propuesta del Ministerio, la ampliación progresiva del periodo de cómputo de la pensión a 30 años, pero descartando los dos peores años cotizados, lo que significaría que la pensión se calcularía con los mejores 28 de cotización dentro de un periodo total de 30 años.
En el desayuno informativo de este martes, Amor ha advertido de las consecuencias de «subir más los impuestos al empleo en este país», ya que puede llegar un momento en el que no haya cotizantes suficientes para soportar tantos pensionistas.
«No puede recaer todo el peso de mantener el nivel de gastos de pensiones exclusivamente en los que cotizan», ha apuntado el presidente de ATA, que ha recordado las recomendaciones del economista José Barea, fallecido en 2014, sobre las pensiones como un problema de la sociedad y no del cotizante, y de su apuesta para subir dos puntos el IVA para sufragar el gasto en pensiones.
Además, Amor ha aludido a una conversación con la presidenta de Unespa, Pilar González de Frutos, en la que insistió en que el sistema de pensiones español estaba pensado para cobrar durante 12 años y, en la actualidad, ese periodo se había extendido hasta 19 años.
«Seamos todos consecuentes y pensemos que esto no se arregla subiendo cotizaciones», ha añadido Amor.