La autopista 407 ETR, considerada como la mayor autopista en concesión del mundo y participada al 43% por Ferrovial, ganó el año pasado 435 millones de dólares canadienses (302 millones de euros), lo que supone un crecimiento del 105% respecto al año anterior debido a la recuperación del tráfico.

No obstante, el impacto de la pandemia todavía sigue pesando sobre la compañía, toda vez que no ha recuperado aún todo el tráfico prepandemia y el beneficio en 2019 era de 576 millones de dólares (400 millones de euros), según las cuentas publicadas por la compañía canadiense.

El año pasado, los ingresos de esta vía ascendieron a 1.327 millones de dólares (922 millones de euros), un 30% superiores, al mismo tiempo que el resultado bruto de explotación (Ebitda) fue de 1.139 millones de dólares (791 millones de euros), un 33% más.

Como resultado del proceso de vacunación y el levantamiento de las restricciones a la movilidad en Canadá, el tráfico en esta carretera creció un 27% el año pasado, lo que le permite seguir contando con suficiente liquidez para hacer frente a sus obligaciones de deuda en 2023.

En el ámbito ESG, la compañía continúa trabajando para lograr su objetivo de reducir en un 25% sus emisiones para 2030, al mismo tiempo que el año pasado alcanzó las 2,8 millones de horas sin bajas entre sus empleados durante su trabajo e incrementó sus donaciones para las iniciativas relacionadas con el Covid-19 y con la preservación del medioambiente.