La contratación total de espacios de oficinas flexibles en Madrid y Barcelona alcanzó los 50.720 metros cuadrados en el año 2022, distribuidos en 29.710 m2 en la capital y en 21.013 m2 en la Ciudad Condal, lo que representa un crecimiento del 21% frente al total contratado en este tipo de espacios durante 2021.
Según las estimaciones de la consultora inmobiliaria internacional JLL, estas cifras confirman la recuperación progresiva y el interés creciente hacia este modelo, hasta el punto de que la contratación de espacios flexibles por parte de operadores flex ya representa, en conjunto, el 6% de la contratación total de oficinas de Madrid y Barcelona.
«Entre las ventajas que se observan en los modelos flex está el mayor control del gasto, la posibilidad de adaptar los espacios a la creciente movilidad de los trabajadores y al teletrabajo, una mayor retención de talento y mejora de la eficiencia», ha señalado la responsable de Markets de JLL España, Adriana Gorri.
Los principales operadores, tanto en Madrid como en Barcelona, concentran casi el 80% del mercado de espacios flexibles. Destacan por su cuota IWG (Regus, Spaces, HQ y Signature), que acumula una cuota del 24% en Madrid y del 21% en Barcelona; WeWork, que ha alcanzado un 6% y un 13% en Madrid y Barcelona respectivamente; y Utopicus, que opera con un 9% en la capital y un 11% en la Ciudad Condal. First Workplaces, Lexington y Loom House, por su parte, rondan entre el 5% y 8% de cuota media en ambas ciudades.
Para los próximos años, JLL prevé un crecimiento de la oferta flex en ubicaciones céntricas en las dos urbes, dado que es donde se concentra gran parte de la demanda, sin perder de vista las zonas secundarias y periféricas, donde se genera demanda de superficies medianas, para las que una solución flexible «es más atractiva que el alquiler tradicional».