Unilever registró unos beneficios netos atribuidos de 7.642 millones de euros en 2022, lo que implica una mejora del 26,3% respecto a las ganancias de 6.049 millones de euros de 2021, según ha informado la compañía británica.
En cuanto a los ingresos, estos se situaron en 60.073 millones de euros, y representan un incremento del 14,5% comparado con el volumen de negocio de 52.444 millones de euros del año previo. El 46% de estos procedieron de Asia-Pacífico y África, el 35% de América, y el 19% restante de Europa.
Por su parte, en el cuarto trimestre, los ingresos fueron de 14.600 millones de euros, un 11,4% más.
No obstante, los costes también se encarecieron en 2022, con unos 49.318 millones de euros anotados, un 12,7% más que los 43.742 millones de euros de los doce meses anteriores.
«A pesar de un enormes incrementos en costes materiales, hemos optado por reforzar nuestra marca y la inversión en marketing», ha señalado el consejero delegado de Unilever, Alan Jope.
De cara al 2023, Unilever anticipa que las ventas crecerán con fuerza, aumentando en volumen y competitividad a medida que progrese el año.
Por otra parte, pronostica que los costes materiales se incrementarán en el primer semestre aupados por la inflación para moderarse después considerablemente en el segundo.