El consejo de administración de CaixaBank ha acordado proponer la distribución de un dividendo en efectivo de 0,2306 euros brutos por acción con cargo a los beneficios del ejercicio 2022, y abonarlos en abril, ha comunicado este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Es un 58% más que el año anterior (0,1463), y representa un ‘payout’ del 55% «en línea con la política que se aprobó para este año de repartir entre el 50% y el 60% de los beneficios», informa la entidad en un comunicado.
CaixaBank, que lo propondrá en la Junta General de Accionistas, distribuirá un total de 1.700 millones de euros, equivalente al 55% de los beneficios del ejercicio, de los que «aproximadamente la mitad» los percibirán la Fundación La Caixa y el Estado a través del FROB (además, la entidad tiene 617.800 pequeños accionistas).
El consejo también ha aprobado la política de dividendos para 2023: una distribución en efectivo del 50% al 60% del beneficio neto consolidado, que se abonará en un único pago en abril de 2024.
El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha destacado que cierran 2022 con más fortaleza financiera y una sólida posición de capital, lo que permite abonar el dividendo de 1.700 millones, que se elevan a 3.500 si se suman los 1.800 millones del programa de recompra de acciones: «Esto nos sitúa en el camino para conseguir nuestro objetivo de distribuir hasta 9.000 millones en el periodo 2022-2024».