Economía

Los principales actores del ecosistema emprendedor celebran la nueva ley de ‘startups’

Algunos de los principales actores del ecosistema emprendedor español han grabado un vídeo conjunto elogiando la Ley de Fomento del Ecosistema de Empresas Emergentes, mejor conocida como ley de ‘startups’, que ha sido aprobada por el Congreso de los Diputados.

Así, la fundadora de South Summit, María Benjumea, ha señalado que se trata de «la ley de la innovación y del talento cualificado» y ha agradecido el consenso entre actores con el que la normativa ha culminado su proceso legislativo.

«Es justo lo que necesitamos para responder al momento económico trepidante que vivimos», ha subrayado sobre el texto, para también celebrar la eliminación de barreras al emprendimiento en serie.

«Necesitábamos un marco normativo que no solo nos equiparase con Europa, sino que nos pusiera en la vanguardia de la innovación y de ahí la necesidad de esta ley», ha asegurado por su parte el presidente de la Asociación Española de Startups, Carlos Mateo.

De su lado, el expresidente de SpainCAP (antes Ascri) y cofundador de Kibo Ventures, Aquilino Peña, ha destacado el fomento de la inversión de los ‘business angels’ a través de la nueva ley, ya que aumentan a un 50% las deducciones por invertir hasta 100.000 euros en ‘startups’.

Otras de las rebajas fiscales al sector que incluye la ley es una reducción al 15% del impuesto de sociedades para ‘startups’ durante cinco años o siete en caso de ser del sector biotecnológico o la exención de tributación por las ‘stock options’ hasta que aparezca un evento de liquidez.

Por su parte, la presidente de Adigital y co-consejera delegada de K Fund, Carina Szpilka, ha puesto de relieve que la ley permitirá crecer a las ‘scaleups’ del ecosistema.

Entre otros aspectos, la ley de ‘startups’ simplifica los trámites para la concesión de visados a personal cualificado y ‘nómadas digitales’, así como agiliza la creación de sociedades, que además se puede hacer sin aranceles notariales y registrales.

La condición de ‘startups’ será verificada por Enisa y los socios con los que firme convenios a través de una ventanilla única y con un silencio administrativo positivo para evitar que se formen cuellos de botella a la hora de certificar a estas empresas emergentes.