Tecnología

Siete tendencias tecnológicas legales que transformarán todos los negocios en 2026

Los responsables jurídicos y de cumplimiento normativo deben comprender las herramientas que están transformando su campo y preparar a sus equipos para una forma de trabajar muy diferente en 2026.

Foto: Adobe Stock

Los equipos jurídicos y de cumplimiento normativo se adentran en uno de los años más impulsados por la tecnología que haya vivido la profesión. La inteligencia artificial (IA), la automatización y las nuevas presiones normativas están convergiendo, creando un panorama en el que la velocidad, la precisión y la visión estratégica determinan qué organizaciones se mantienen a la vanguardia.

Según el informe El futuro de los profesionales de Thomson Reuters, la mayoría de los expertos ya esperan que la IA transforme su trabajo en un plazo de cinco años, y muchos la consideran una fuerza positiva. El reto ahora es claro: los responsables jurídicos y de cumplimiento normativo deben comprender las herramientas que están transformando su campo y preparar a sus equipos para una forma de trabajar muy diferente en 2026.

Estas son las tendencias que más importarán.

1/ Agentes de IA como asistentes legales

    Los agentes de IA suponen un gran avance con respecto a las generaciones anteriores de asistentes de información, como los motores de búsqueda y los chatbots. Esto se debe a que pueden actuar y trabajar de forma autónoma para alcanzar objetivos, en lugar de limitarse a responder preguntas y generar contenido. Las implicaciones de esto son enormes, ya que, tras delegar todo el trabajo manual y repetitivo, los trabajadores humanos tendrán mucho más tiempo para las tareas más importantes, que a menudo requieren habilidades interpersonales que los ordenadores no pueden igualar y que generan un valor real.

    2/ La IA como motor de la estrategia empresarial

      La capacidad de la IA para pronosticar riesgos, modelar el impacto de los cambios normativos, analizar los mercados e identificar oportunidades de eficiencia se está convirtiendo en un elemento fundamental para la toma de decisiones empresariales. En lugar de limitarse a delegar las tareas rutinarias, los profesionales con visión de futuro recurren cada vez más a las nuevas tecnologías para impulsar la innovación y crear nuevos modelos de negocio. Esto podría incluir la oferta de servicios de IA por suscripción a los clientes y nuevos productos basados en datos.

      3/ Automatización en la administración judicial

      Los tribunales suelen sufrir largos retrasos y escasez de personal cualificado, un problema global que a menudo retrasa la administración de justicia. Para hacer frente a esta situación, es de esperar que se incremente el uso de la IA y la tecnología de automatización como herramienta administrativa, ayudando a programar, crear resúmenes personalizados y documentos procesales para los jueces y el personal judicial, así como a anticipar y predecir los cuellos de botella y los retrasos.

      4/ Supervisión del cumplimiento normativo permanente

        Las plataformas de inteligencia regulatoria realizan tareas que implican el seguimiento de los cambios normativos y legislativos, proporcionando seguimiento y actualizaciones en tiempo real, y en ocasiones incluso generando y presentando informes automáticamente para mantener el cumplimiento normativo. Este campo de la tecnología regulatoria, en rápido crecimiento, ayuda a los equipos jurídicos a evitar incurrir en riesgos normativos, señalando los nuevos requisitos y realizando un seguimiento de los cambios legislativos en las jurisdicciones pertinentes. Al convertir la respuesta a los cambios normativos en un proceso gestionado y automatizado, los profesionales del derecho estarán en mejores condiciones para evitar sorpresas inesperadas.

        5/ La ciberseguridad como herramienta esencial para la supervivencia

        Los bufetes de abogados, con sus enormes tesoros de datos de clientes, representan objetivos primordiales para los ciberdelincuentes. Así lo demuestran las estadísticas, que nos dicen que más del 40% de las empresas estadounidenses sufrieron violaciones de seguridad el año pasado. Esto significa que, en 2026, la seguridad ya no puede ser una prioridad exclusiva del departamento de TI. Los bufetes que no implementen defensas sólidas, protejan la confidencialidad y creen una cultura de seguridad en toda la organización se arriesgan a sufrir enormes sanciones y, lo que es aún más perjudicial, a perder la confianza de sus clientes.

          6/ Litigios predictivos

          Hasta ahora, los casos de uso de la IA en los bufetes de abogados se han centrado en la automatización de flujos de trabajo repetitivos, como la investigación y la síntesis. Es probable que esto cambie a medida que modelos más sofisticados abran la puerta a casos de uso probabilísticos, como la predicción del resultado de los litigios y la evaluación de riesgos. La capacidad de estimar con mayor precisión los posibles costes y beneficios permitirá a los bufetes de abogados fijar precios y gestionar los casos de forma más eficiente, así como tomar decisiones más fundamentadas sobre cuándo luchar y cuándo llegar a un acuerdo.

          7/ El cumplimiento normativo como parte del tejido de la automatización cotidiana.

          Hoy en día, el software para llevar a cabo todo tipo de tareas, desde la automatización del marketing hasta los recursos humanos o la conciliación de cuentas basada en la IA, viene con una funcionalidad de cumplimiento normativo «incorporada». Aunque esto eliminará parte del trabajo manual y repetitivo de la agenda de los profesionales del derecho y del cumplimiento normativo, seguirá siendo necesario supervisar los casos en los que empleados que no son especialistas en derecho podrían encargarse de las aprobaciones. Espero que la auditoría del funcionamiento de los procesos de cumplimiento normativo en herramientas y plataformas integrales y no especializadas constituya una parte cada vez mayor de la carga de trabajo de los profesionales del ámbito jurídico y del cumplimiento normativo en 2026.

            A medida que estas tecnologías maduren, el panorama legal y normativo seguirá pasando de una supervisión reactiva a una estrategia proactiva basada en la inteligencia. Las empresas y los profesionales que prosperarán en 2026 serán aquellos que adopten estas herramientas desde el principio, desarrollen las habilidades necesarias para utilizarlas correctamente y se posicionen como socios de confianza en un entorno empresarial cada vez más complejo.