La inteligencia artificial (IA) ya puede descifrar lenguajes complejos (por ejemplo, el llanto de los bebés). También puede revelarnos nuestra vocación –descubrirnos cuál será el trabajo que nos hará felices– o prestarnos servicios médicos sin tener que salir de casa. Por poder, la IA también puede ser la clave para acabar con la soledad. Puede deshumanizarnos, pero también hacernos más humanos, ya que tiene identidad múltiple: es –a la vez– problema y solución. Y sin embargo, aún apenas hemos visto nada.
La verdadera revolución acaba apenas de comenzar. Los expertos coinciden en que 2023 quedará atrás como una precuela. Será este 2024 (como ya predijo Bill Gates) el año en el que los libros fecharán el inicio de la ‘Era de la IA’. Un futuro cada vez más presente en el que ya trabajan muchas empresas españolas, todas ellas yendo más allá de lo generativo y desarrollando modelos de IA que nunca antes se habrían imaginado:
1. Guiar a los jóvenes hacia su vocación
Imagina un mundo donde cada estudiante estuviera guiado por una IA personalizada que conoce sus gustos, sus miedos y lo comprende profundamente. En ello trabaja la compañía extremeña Neock, que presenta neoIKIGAI, una nueva herramienta diagnóstica de orientación vocacional y profesional que permite automatizar el proceso de orientación de forma que permita a los jóvenes descubrirse.
Con la aplicación de la IA y su poder transformador, neoIKIGAI actúa como un motor de toma de decisiones inteligente, capaz de procesar grandes cantidades de datos y generar recomendaciones altamente personalizadas a los usuarios, además, a través de algoritmos de aprendizaje automático avanzados, analizará una gran variedad de factores, desde las preferencias individuales hasta las tendencias del mercado laboral en tiempo real, para ofrecer a los usuarios una visión clara y concisa de las opciones educativas y profesionales que mejor se adapten a sus intereses y habilidades en función de su ikigai.
2. Descifrar el llanto de un bebé
Nuestro oído solo es capaz de detectar sollozos (‘berridos’ dirían algunos), pero la IA es capaz de transformar estos sonidos en palabras. Lo ha conseguido una empresa española, Zoundream, que ha creado el primer traductor del llanto del bebé para saber lo que el niño necesita en cada momento, o incluso si está enfermo. A través del aprendizaje automático y técnicas de procesamiento de señales, la startup dirigida por Ana Laguna ha descodificado el llanto y todos sus sonidos, desarrollando modelos predictivos con precisiones superiores al 90%. La startup de salud tecnológica se dedica al desarrollo de IA aplicada al procesamiento sonoro, pudiendo instalar su hardware en cualquier dispositivo que disponga de un micrófono. Según Laguna: «El proceso para descifrar el llanto de los bebés implica la recopilación de una gran cantidad de datos de audios en diferentes situaciones, estados emocionales y de salud. A través de ensayos clínicos llevados a cabo en colaboración con hospitales e instituciones clínicas, los datos se conectan con señales neurofisiológicas y comportamentales para entrenar algoritmos y que consigan identificar patrones».
3. Dejar de sentirnos solos
La soledad es uno de los mayores problemas que existen actualmente en la sociedad. Siempre se habla de que la tecnología es una de las causas de este sentimiento, pero, ¿puede también ser la solución? La startup española Saturno Labs cree firmemente que sí, por ello ha creado un asistente de cuidado integral para uno de los colectivos más sensibles, el de las personas mayores. Durante los últimos meses han realizado pruebas de su tecnología en diferentes hogares y han obtenido resultados muy positivos, mejorando hasta un 50% en la soledad percibida en los usuarios. Natalia Rodríguez, CEO y cofundadora, explica que cuentan con dos módulos específicos para la soledad no deseada, uno de ellos enfocado en socializar con otras personas y otro para trabajar la soledad a nivel psicológico. «Mientras la persona habla con nuestro sistema, somos capaces de evaluarle y mandar contenido personalizado en tiempo real para que pueda estar mejor», concluye.
4. Análisis de sangre y diagnósticos médicos sin salir de casa
La IA se posiciona como una herramienta clave en el ámbito de la salud. En este escenario, la startup Ailin ha introducido en el mercado kits para el análisis de sangre desde casa, agilizando el proceso de recolección de muestras y ofreciendo diagnósticos integrales y más precisos gracias a la IA.
Según Isabel Caruana, CEO de Ailin: “Nuestros algoritmos proporcionan a los médicos una visión detallada de los riesgos asociados con el desarrollo de enfermedades específicas”. Apunta también que, gracias a esta tecnología, pueden apostar por un enfoque holístico, abordando tanto los síntomas como las causas de las enfermedades, así como los factores que pueden influir en su progresión. «Esta integración de la IA con diversas disciplinas de la salud no solo facilita la atención médica, sino que también permite proyectar posibles escenarios futuros, contribuyendo así a la prevención de enfermedades antes de que se manifiesten».
Como destaca la CEO de Ailin, «la IA en medicina va a ser una herramienta fundamental para acelerar las tareas más rutinarias, permitiendo al médico centrarse en la dimensión más humana de la interacción. Vamos a poder cultivar esas cualidades, que están fuera del alcance de la IA y que cada vez serán más necesarias».
De acuerdo con esta reflexión se muestra uno de los mayores expertos en IA de España, Pau García-Milà, que asegura que la IA dejará de ser invisible: «Nos acostumbraremos a trabajar
de su mano y acabará haciéndonos más humanos, porque al fin podremos centrarnos en cultivar las habilidades que nos diferencian de las máquinas».