Los rumores de un coche fabricado por Apple vuelven con fuerza. Ahora, el vehículo eléctrico de la manzana mordida podría retrasar su fecha de lanzamiento hasta 2028, tal y como ha anunciado el periodista de Bloomberg Mark Gurman, que habitualmente adelanta (y con acierto) los siguientes movimientos de la compañía.
Este nuevo retraso en el coche de Apple –apodado extraoficialmente como ‘Apple Car’– marca otro capítulo en la búsqueda de la gigante tecnológica por llevar un vehículo eléctrico parcialmente autónomo a los consumidores.
La fecha de lanzamiento prevista en un primer momento era 2026, aunque la compañía habría ajustado sus planes iniciales, abandonando además la idea de un vehículo completamente autónomo sin pedales ni volante, y en su lugar, se enfocará en un sistema de ‘Nivel 2+’.
Este nivel de autonomía permitirá que el vehículo se centre en el carril de manera autónoma y ajuste la velocidad de crucero de forma adaptativa, pero estará por debajo de la tecnología de Nivel 4 que se había planeado anteriormente. El Nivel 4 habría permitido que el vehículo condujera de manera autónoma en circunstancias limitadas.
Las decisiones clave en este cambio de rumbo se tomaron en reuniones que involucraron al consejo de administración de Apple, al CEO Tim Cook y al jefe del proyecto, Kevin Lynch. Según Bloomberg, el consejo estuvo presionando durante el 2023 a la dirección de la empresa en relación con el proyecto, conocido internamente como Titán.
Se cree que su desarrollo comenzó hace una década, en 2014, aunque la información oficial sobre el nombre, las especificaciones y el progreso del coche ha sido escasa en los últimos 10 años. Algunas de las primeras estimaciones sugerían que el lanzamiento podría haber tenido lugar en 2019, pero los múltiples retrasos han llevado la fecha hasta al menos 2028.
Las acciones de Apple han experimentado un aumento leve, alcanzando los 194,96 dólares a las 15:20 de la tarde. En el último año, las acciones de la compañía han subido más del 38%, superando los 140 dólares por acción que registraban en enero del año anterior.
Apple ha dedicado considerables recursos financieros al proyecto del coche, gastando cientos de millones de dólares al año en medio de despidos, cambios de estrategia y retrasos. El diseño del coche estaba en la fase de preprototipo a finales de 2022. Un eventual lanzamiento exitoso del vehículo eléctrico colocaría a Apple en competencia directa con fabricantes como Tesla, Ford, GMC y Rivian, (este último respaldado por una inversión de más de 1.300 millones de dólares de Amazon).
Figuras destacadas en la industria automotriz, como Jim Farley, CEO de Ford, y Elon Musk, CEO de Tesla, han expresado recientemente dudas sobre la rentabilidad y la seguridad de los vehículos totalmente autónomos. Las funciones de conducción autónoma de Tesla, por ejemplo, incluyen la dirección automática en calles urbanas y la capacidad de detenerse con supervisión del conductor, aunque la plena autonomía, según Tesla, depende de «lograr una fiabilidad muy superior a la de los conductores humanos» y de la aprobación reglamentaria.