Uno de los temas principales a tratar es el de los refugiados y la actuación de Europa al respecto. La clave según Álvarez es “ser solidario y generoso”, abriendo nuestras puertas a aquellos refugiados que buscan asilo, y sobre todo, “Europa debe dejar un poco de lado las políticas económicas y centrarse más en lo social”.
Asunto candente es también el de Cataluña. Los socialistas pretenden dialogar y llegar a un acuerdo que consiga evitar la ruptura de España y eliminar la corrupción, sobre todo en esta Comunidad Autónoma en la que se enmascaran estos casos con el nacionalismo. El partido de Sánchez pretende también llegar a un acuerdo con el resto de fuerzas políticas a la hora de reformar la Constitución; reforma necesaria que para llevarla a cabo necesita el consenso mayoritario.
Llama la atención el hincapié que se hace en el programa electoral acerca del deporte, prácticamente igualándolo a la cultura y a la educación, constituyéndolos como tres pilares básicos para conseguir un futuro mejor. Se pretende fomentar que se practique deporte, ayudar a los deportistas que no pueden llegar a la élite a través de la democratización de las federaciones, acordar un modelo educativo común a todas las autonomías, independientemente de que después se impartan también contenidos específicos elegidos por cada autonomía, o crear fondos para ayudar a las mujeres artistas.
Todavía con la incertidumbre de qué pasará el próximo 26 de junio y de si se necesitará el pacto con otros partidos para alcanzar la mayoría de gobierno, el PSOE está convencido de que el cambio y la socialdemocracia deben estar abanderados por un solo nombre: Pedro Sánchez.