XOIA se dedica a transformar el metaverso en herramientas útiles, con aplicaciones reales, en diversos sectores donde la empresa gallega implementa tecnología de realidad extendida, con realidad aumentada y virtual. Esto ya no es el futuro, es el presente.
Así lo explica su CEO, Xoel Vázquez: “XOIA lleva trabajando con realidad aumentada y virtual desde antes de que Zuckerberg se lanzase a esta carrera por conquistar un universo que aún no existe. El foco de XOIA es distinto: usar esta tecnología para crear herramientas que ya hoy día suponen un cambio de paradigma en los campos donde se aplican”.
Efectivamente, Vázquez empezó a incubar esta idea ya en la universidad. Su empresa lleva innovando con un equipo altamente especializado y un gran bagaje desde el 2018, bastante antes de que esta tecnología fuera conocida. Realizan proyectos de alta calidad donde el pilar es conocer al cliente y sus necesidades para diseñar experiencias en las que la usabilidad se centra en el usuario final.
Todo ello, cumpliendo el objetivo claro de democratizar y hacer más sencilla este tipo de tecnología. Así, en lugar de esperar un futuro estilo Ready Player One, XOIA se sirve de la realidad extendida para transformar las mil palabras, ya no en una imagen, sino en experiencias inmersivas e interactivas que cambian completamente la manera de comunicar, de aprender o de experimentar, comenzando por uno de los mercados más potentes: la Industria 4.0.
Y es que es, precisamente, la industria, uno de los sectores que la empresa ha revolucionado. Lo ha logrado haciendo de la realidad aumentada un game changer que está cambiando la manera en la que se gestiona el conocimiento.
“Antes, un técnico de mantenimiento o el operador de maquinaria industrial tenía que tener en la cabeza decenas de procesos y datos o verse obligado a consultar tediosos manuales técnicos, lo que acaba redundando en tiempo perdido y más posibilidades de cometer errores”, recuerda Vázquez.
Ahora, según explica el CEO, con su solución Augmented factory, una plataforma para crear manuales técnicos en realidad aumentada, se consigue que solo con unas gafas o un simple móvil, ese operario pueda visualizar instrucciones precisas en AR superpuestas a su entorno de trabajo. Por ejemplo, un técnico puede guiarlo durante su uso a cómo utilizar una nueva herramienta sobre su campo de acción.
Esto significa un gran avance, ya que se accede de manera inmediata al conocimiento técnico más complejo y a la vez, se ejecutan las operaciones con garantía, seguridad y en menos tiempo aún con poca o ninguna experiencia.
Pero advierten que esto es solo el principio de lo que vamos por vivir: “Mañana cualquiera en su casa podrá utilizar esta tecnología para arreglar un electrodoméstico o montar un mueble”. Y ese paso hacia adelante en la innovación, pasa por poner el control en manos de sus clientes.
La innovación forma parte del ADN de XOIA y por eso trabajan constantemente en ofrecer nuevas soluciones para el mercado: “Darles el poder de crear y gestionar el contenido, el conocimiento, a los clientes”, adelanta Vázquez.
Y es que lo más costoso de este tipo de proyectos siempre es la creación y gestión del contenido, por ejemplo, para generar un nuevo procedimiento técnico en un manual de realidad aumentada. Que este trabajo dependa de un tercero, en lugar del usuario de la herramienta, se traduce en más recursos económicos y menos agilidad a la hora de incorporar dichos contenidos. Y eso, para
Vázquez, es una gran barrera. “Gracias a nuestra plataforma no-code son los usuarios quienes pueden crear y gestionar, de manera sencilla, el contenido generado en realidad aumentada, de forma directa y en tiempo real”, explica el CEO.
En esa línea, uno de los objetivos de XOIA pasa por impulsar soluciones tipo SaaS. “Queremos que sean escalables y rentables, como nuestro proyecto, Augmented Factory”. Con esta herramienta única y diferencial, buscan consolidarse como referencia nacional para dar el salto al mercado internacional a mediados de 2023. Aunque ese salto va más allá de la Industria 4.0. Porque XOIA aplica la tecnología de la realidad extendida a otros sectores: Cultura, Turismo o Marketing. En el caso de museos y exposiciones, la realidad virtual o aumentada, transforma una visita tradicional en un viaje en el tiempo, una aventura que permite a los visitantes pasar de ser simples observadores de cartelería obsoleta a transformarse en protagonistas de la historia.
Un buen ejemplo de esto es una de sus experiencias más recientes; en ella, han recreado el histórico primer viaje a América, de tal forma que el visitante se pone en la piel de un grumete a las órdenes de Pinzon en la Carabela pinta. En lugar de imaginar: ver y vivir. Porque, si algo tienen claro, es que los espacios monumentales se encuentra en transición hacia una museología digital”.
Esto tiene muchas ventajas y aplicaciones, entre ellas, la de la accesibilidad: recrear cualquier exposición y llevarla a aquellos colectivos que no puedan desplazarse a verla, haciendo el arte y la cultura más accesibles. Con todo, los diferentes usos y servicios que ofrecen dejan claro varias cosas: la realidad extendida es transversal, aplicable a muchísimas áreas, evoluciona a pasos agigantados y no solo es el futuro, sino que ya es el presente.