Cuando tienes dinero, lo aconsejable es no dormirse en los laureles de la bonanza económica y pensar en inversiones rentables que aumenten tu capital y te aseguren un futuro igual de confortable que tu presente. Por eso, las estrellas del cine o la música, los deportistas de élite y otros tantos artistas invierten su dinero en restaurantes, tiendas u otros negocios. Sin embargo, el sector hotelero ha cobrado en los últimos años inusitada fuerza como una de las opciones más populares de inversión.
Al menos así se lo ha parecido a Cristiano Ronaldo, con su hotel Madeira en Lisboa; Clint Eastwood con Mission Ranch en California, y las joyas de DiCaprio y de Niro en Belice y Nueva York, el complejo Blackadore Caye y el Greenwich Hotel. Pero el destino escogido por Brad Pitt no se queda atrás: el pueblo de Zablaće, en Croacia, todo un vergel ajeno a la masificación turística.
El holding de inversión TFI ha invertido ya 70 millones de dólares en el proyecto para este futuro resort ecológico y en contacto con la comunidad croata y su cultura. Tras reunirse con el grupo suizo, el arquitecto Nikolas Bašić y otros socios, las cifras planteadas en esta inversión hotelera se han fijado en torno a los $1,500 millones de dólares. Un presupuesto elevado para dar forma a villas, un campo de golf, tiendas, restaurantes y un magnífico hotel.
Bašić fue el acompañante de Pitt durante su visita a la localidad y, si el plan funciona, se prevé la remodelación de la marina y la construcción de una escuela y una clínica en la región. Además, este proyecto convertirá Zablaće en un destino ecológicamente responsable. Según fuentes del sector, el proyecto llevará por nombre “Barabriga”, aunque todavía no está confirmado.