Con una extensión de menos de 500 km2 y algo más de 85.000 habitantes censados, el Principado de Andorra –a caballo entre España y Francia– está redefiniendo desde hace algún tiempo su estrategia económica y empresarial. Más allá del turismo o el comercio, sectores con los que se le identificaba tradicionalmente, el gobierno del país apuesta ahora con decisión por la innovación, la tecnología o la digitalización.
De todo esto se hablará y debatirá en el primer Forbes Economic Andorra Summit, que se celebrará este 9 y 10 de abril en el hotel Park de Andorra la Vella, una oportunidad única de acercarse a la nueva realidad de este pequeño país, cada vez más atractivo para los inversores.
Para conocer más de cerca su realidad, entrevistamos a Xavier Espot Zamora, jefe de Gobierno de Andorra, quien atiende amablemente a Forbes pocas horas Summit.
En primer lugar, ¿cómo valora que Andorra acoja este primer Forbes Economic Andorra Summit 2025? ¿Qué espera de una cita tan importante e interesante como ésta?
Estamos muy satisfechos de acoger el Forbes Economic Andorra Summit 2025 que reunirá en Andorra a líderes empresariales, expertos y responsables políticos para analizar las oportunidades económicas y de inversión de nuestro país.
Desde hace algunos años, especialmente después de la pandemia de la Covid-19, aceleramos el proceso de diversificación e innovación de nuestra economía porque queremos enfocarnos hacia otros sectores más allá del turismo, el comercio, las finanzas y la construcción.
Por este motivo, las cuestiones que se abordarán en el foro tienen la clara voluntad de posicionar a Andorra como actor clave en la economía digital y sostenible, abordando al mismo tiempo los retos y oportunidades que ello conlleva. Esperamos que este sea el primero de muchos más foros de Forbes en nuestro país.
Desde hace algún tiempo, el Gobierno andorrano está muy comprometido con la atracción de talento, el desarrollo de proyectos innovadores y la apuesta por la tecnología digital. ¿Qué aspectos y medidas destacaría en este sentido? ¿Por qué el Principado se ha decantado por esta estrategia?
Como le decía, el Gobierno tiene muy claro que debíamos atraer nuevos sectores económicos vinculados con la innovación y la sostenibilidad. La apertura de nuestra economía, hace más de una década, ha supuesto un crecimiento muy importante en estos últimos años, especialmente después de la pandemia, pero también es cierto que ha redundado a menudo en sectores muy desarrollados y maduros como el turismo o la construcción.
Andorra Business, la agencia de promoción y desarrollo económico de Andorra, trabaja para promocionar nuestro país como destinación para la inversión empresarial y en la gestión de proyectos específicos, para canalizar talento e iniciativas empresariales de valor añadido en un marco de conocimiento, tecnología y economía digital. Y en estos últimos años, estamos siendo testigos del aterrizaje de empresas de estos sectores que se han establecido mediante la inversión extranjera, y empresas que han nacido en el país, con talento e inversión local.
Por este motivo, seguimos apostando por atraer empresas de valor añadido gracias a unas normas claras y a una estrategia alineada con el sector privado. Como sectores estratégicos, hablamos de la salud, del bienestar, de los deportes, que ya representan un 7% del PIB, así como de la biotecnología y de la industria de los eSports, sectores que hemos regulado específicamente estos últimos años.
Frente a la tradicional imagen turística, Andorra se está reposicionando como un hub internacional de negocios, apostando por sectores estratégicos a nivel internacional. ¿Cuáles son las virtudes y ventajas que ofrece su país a nivel de emprendimiento y atracción de inversiones?
Una de las principales ventajas competitivas que tiene Andorra es su fiscalidad moderada. Pero este no es el único interés que suscitamos, porque hay muchos más países con una fiscalidad moderada en Europa y en todo el mundo. Los convenios de no doble imposición, las excelentes relaciones bilaterales con España y Francia o disponer de una legislación moderna y adaptada también son factores que dan seguridad jurídica y suponen una excelente oportunidad para atraer negocios.
Tenemos otros activos que van más allá de la fiscalidad; somos uno de los países más seguros de todo el mundo, con uno de los índices de criminalidad más bajos, tenemos una asistencia sanitaria pública de calidad y accesible, y disponemos de una estructura educativa única en la que conviven tres sistemas -andorrano, español y francés- que garantizan una educación pública de calidad, juntamente con la educación privada y en un entorno natural incomparable. Además, tenemos buenas conexiones con Madrid, Barcelona o Toulouse.
Son muchas las voces que subrayan el compromiso de Andorra, en los últimos tiempos, con la sostenibilidad y la digitalización. ¿Qué políticas o medidas se han llevado a cabo últimamente en esta dirección y cuáles le parecen las más relevantes?
En el ámbito de la sostenibilidad hemos trabajado muy duro porque somos conscientes de los riesgos que conlleva el cambio climático en un país de alta montaña como el nuestro. Hemos estado siempre comprometidos a nivel internacional y nacional para avanzar hacia la transición económica, energética y social, hacia un modelo de país más sostenible y resiliente, en el que las generaciones futuras puedan desarrollar su proyecto vital con todas las garantías.
Y esto también significa que nuestra inversión pública se dirija hacia aquellos ámbitos económicos sostenibles e innovadores y hacia el levantamiento de barreras para dejar paso al potencial de las empresas y los emprendedores. Así lo entendemos y así lo entiende la mayor parte del sector privado que concibe la innovación, la digitalización y también la inteligencia artificial como pilares claves a medio plazo.
Así pues, basándonos en esta economía del conocimiento, estamos potenciando las actividades económicas que se caracterizan por la innovación, la investigación y el desarrollo, la educación y el uso de tecnologías y recursos humanos cualificados que permitan incrementar el valor añadido y la productividad del conjunto de nuestra economía. Éste es el enfoque que permitirá diversificar la economía y será el nuevo modelo económico para las próximas generaciones.
Las empresas son uno de los principales pilares del programa de digitalización que ha lanzado nuestro gobierno con el objetivo de incrementar la madurez digital. Además de fomentar el uso de servicios cloud e IA, este programa ayuda a las pymes a adoptar tecnologías que aumentan su eficiencia y competitividad, acelerando el crecimiento económico del país.
Podemos y debemos enfocar esta revolución como una herramienta para garantizar la sostenibilidad, para que, al servicio de las nuevas tecnologías, aparezcan sectores emergentes e innovadores, o para fomentar el auge de las empresas de servicios basadas en el conocimiento y en el talento.
Además, Andorra ha ido diversificando su economía y potenciando sectores como la tecnología, las finanzas y la salud. Desde el gobierno hemos impulsado iniciativas para fomentar la inversión extranjera y el emprendimiento, buscando reducir la dependencia del turismo. Esto ha creado nuevas oportunidades laborales en áreas como la tecnología, el comercio electrónico y los servicios financieros, así como una demanda de profesionales calificados en estas áreas.
Y finalmente, a modo de conclusiones, ¿cuáles diría que los son los retos y las oportunidades a los que se enfrenta Andorra y su ecosistema empresarial en estos momentos de incertidumbre económica global? ¿Cómo ve la posición del Principado en los próximos años?
Uno de los principales retos es la definición de nuestro encaje con la Unión Europea con la que mantenemos acuerdos como el de unión aduanera, de cooperación, de fiscalidad y monetario. Pero tenemos que ir más allá y estamos convencidos que para acompañar y fortalecer la diversificación de nuestra economía necesitamos un instrumento clave como el Acuerdo de asociación con la UE que se encuentra en su fase final y que será la piedra angular de todo un proceso que nos haga menos dependientes de ciertos sectores económicos. Por ello, queremos ser parte del mercado interior de la Unión y queremos hacerlo de forma equilibrada, adaptando determinadas cuestiones para no comprometer los equilibrios sobre los que se sustenta la realidad andorrana. Y más en tiempos como los actuales.
Andorra ha superado a lo largo de estas últimas tres décadas grandes retos dando una imagen de seriedad y compromiso con la comunidad internacional. Por lo tanto, no tengo ninguna duda que estaremos donde debemos de estar: en el lado de los países y las organizaciones comprometidos con los grandes retos internacionales y que defienden el multilateralismo y el Estado de derecho.