Libre, actriz, humorista, dama de las artes escénicas y cinematográficas, abarcó casi todos los registros dentro y fuera del escenario, generosa en sus interpretaciones. De gran ternura, enorme humanidad y muy trabajadora.
Destacó en los registros más difíciles como actriz, en el humor y la comicidad, camino que le abrió desde sus comienzos la puerta del cariño y reconocimiento del público, allí donde aparecía, ya fuera cine o teatro. Dejando siempre en sus seguidores un roce de bienestar. “¡Ahí está la Sardà!”, decían sus admiradores.
Sus inicios fueron en el teatro aficionado y fue en 1962 con Cena de matrimonios de Alfonso Paso, cuando recibió la alternativa en el teatro profesional. La última vez que la vi actuar fue en Ocho apellidos catalanes; todavía río al recordarla en sus escenas.
Desde estas líneas decirle gracias por haber hecho reír al público, la labor más difícil e ingrata en nuestra profesión. Gracias por tus 78 años dedicados a las artes escénicas y cinematográficas, por ser la maestra de ceremonias de cuantos te hemos admirado. Besos.
Enrique Salaberria es presidente y fundador del Grupo Smedia, destacada empresa en la gestión de teatros en Madrid.