El sector náutico es, especialmente en la isla de Ibiza, sinónimo de lujo en un entorno paradisiaco. Sin embargo, detrás de esa imagen idílica de mares color turquesa, se esconde un problema que no puede ser ignorado por más tiempo: el mar Mediterráneo es uno de los mares más contaminados del mundo y uno de los más amenazados tal y como demuestra la delicada situación de lugares como la Manga del Mar Menor.
Afortunadamente, la creciente conciencia ambiental y los desafíos del cambio climático están haciendo que la industria náutica ya esté replanteándose su enfoque y busque formas de reducir su huella ecológica. Ejemplo de ello ha sido la gran acogida de los talleres organizados por la fundación ambiental IbizaPreservation gracias a una subvención del departamento de residuos del Consell Insular de Ibiza bajo el título ‘En camino hacia una isla circular: un enfoque sostenible para empresas del sector turístico’.
El primero de estos talleres, que tuvo lugar el pasado día 4 de septiembre, fue precisamente el de ‘Reducción de residuos en el mar, claves para un sector náutico consciente y transformador’, ya que, la navegación recreativa y comercial tiene un impacto significativo en el medio ambiente. Es bien sabido que los motores de combustión de las embarcaciones liberan emisiones contaminantes, que los productos empleados para la limpieza de las embarcaciones muchas veces no son biodegradables, o que la correcta gestión de las sentinas y de las aguas grises, en ciertos momentos del año brilla por su ausencia en unas islas tan pequeñas como Ibiza y Formentera. A eso hay que sumarle la importante degradación de las praderas de Posidonia Oceanica causada por el fondeo ilegal de embarcaciones sobre esta planta que actúa como auténtico pulmón del Mediterráneo.
Claves
La buena noticia es que el sector náutico, tal y como demostró la afluencia de empresas al taller organizado por IbizaPreservation, puede y debe hacerse más sostenible. Y para ello hay muchas formas de abordar este desafío.
Por un lado, la apuesta por tecnologías limpias puede marcar la diferencia. La transición hacia motores eléctricos o híbridos reduce significativamente las emisiones de carbono mientras que la energía solar y eólica también pueden utilizarse para alimentar sistemas auxiliares. Por el otro, la industria está ya en posición de adoptar materiales más respetuosos con el medio ambiente en la construcción de barcos mediante la exploración de alternativas a la fibra de vidrio y el uso de madera certificada.
También la mejora de la eficiencia de las embarcaciones puede reducir el consumo de combustible. Esto incluye el diseño aerodinámico de cascos y sistemas de propulsión más eficientes. Estos procesos juegan un papel clave en el sector ya que el ecodiseño de las embarcaciones hace que sea posible “cerrar el círculo” alargando la vida útil de los materiales y, por tanto, la de los productos creados con ellos.
Pero una de las medidas que pueden tener un impacto más inmediato en el sector es la correcta gestión de residuos. Este es un tema que durante el taller celebrado en Ibiza abordó Ayelén Alonso, coordinadora de Plastic Free Ibiza y Formentera junto con dos miembros de la asociación One Planet One Life. Las prácticas de gestión de residuos a bordo y en los puertos deben mejorarse para evitar la contaminación del agua y la acumulación de desechos plásticos, uno de los más graves problemas que afronta nuestro mar. Para ello, desde Plastic Free Ibiza animan a las empresas turísticas a sumarse como signatarios a la Iniciativa Mundial de Turismo y Plásticos de la Organización Mundial del Turismo de Naciones Unidas y contribuir así de forma activa a eliminar la contaminación por plásticos de un solo uso antes de 2025.
Pero sobre todo, es imprescindible apostar por la educación y la concienciación. La formación, cómo la desarrollada por IbizaPreservation dirigida de propietarios y operadores de embarcaciones en prácticas sostenibles, es esencial así como la concienciación sobre la importancia de preservar los ecosistemas marinos. Por ello desde IbizaPreservation han querido este año centrar sus esfuerzos especialmente en este sector dentro de su estrategia de reducción de residuos.
Beneficios
Pero es que, además de mitigar el impacto ambiental, la adopción de prácticas sostenibles en el sector náutico puede tener beneficios económicos. La creciente demanda de turismo sostenible y la preferencia de los consumidores por empresas respetuosas con el medio ambiente pueden impulsar el crecimiento del sector. Además, todo apunta a que las oportunidades de financiación y subvención de proyectos específicamente dirigidas a sectores en transformación sostenible serán cada vez más abundantes. Por ello es especialmente interesante la experiencia de Maarten Bernhart CEO de La Bella Verde quien, durante la formación de Ibiza, explicó cómo su empresa ha invertido en esta filosofía desde el principio, comenzando por la construcción de barcos con materiales duraderos, de fuentes sostenibles y totalmente reciclables, hasta la conversión de barcos al final de su vida útil en energía solar y manejando una operación de alquiler con una huella positiva.
Este es solo un ejemplo de cómo el sector náutico enfrenta un desafío importante en su camino hacia la sostenibilidad, pero también una gran oportunidad. Al adoptar tecnologías más limpias, materiales sostenibles y prácticas respetuosas con el medio ambiente, la industria puede navegar hacia un futuro más verde y hacia un mar más azul. La preservación de nuestros océanos y la belleza natural que ofrecen dependen de las decisiones que tomemos hoy y el sector náutico tiene la responsabilidad y la capacidad de liderar este cambio hacia la sostenibilidad.
Directora de la Fundación IbizaPreservation