“Agosto va pasando, sediento, cansado”. Hubo un tiempo en que las canciones moñas cotizaban al alza, tal y como ahora lo hace el ‘autotune’. Yo me sabía todas, incluido este temazo de Álex Ubago, un donostiarra que venía a ser Fran Perea en mejor, pero sin pasarse, y que a mí siempre me recordó a Ross Geller, aunque con cero gracia. Nunca entendí demasiado bien lo que contaba “Agosto”, el tema del que rescato la primera frase, pero ese arranque me parece que define bien una sensación que a mí me invade en el ocaso de cada mes de agosto: cansancio, introspección, sensación de fin de ciclo.
Celebramos el año nuevo en enero porque toca, pero yo nunca he tenido ese ‘feeling’ de estreno en ese mes. Hasta he tenido más ganas de apuntarme al gimnasio en septiembre. Por algo los de los fascículos tenían septiembre como mes fetiche, era el mes perfecto empezar a coleccionar cosas como guerreros míticos de la Antigua Roma. Sin matasuegras, sin reuniones familiares, muchos celebramos sin saberlo la Nochevieja en el mes de agosto. Y, sin llamarles propósitos de año nuevo, nos proponemos más cosas que nunca.
Los últimos días de agosto tienen ese marchamo portugués, habanero, veracruzano. A mí siempre me entra algo de nostalgia y el cuerpo me pide hacer balance. Siempre tengo el típico momento de baño reflexivo en la playa, mirada al horizonte sentado en la arena, en los que sediento y algo cansado planeo lo que debería deparar el nuevo curso. Incluso, si vuelves antes a tu ciudad y ésta no es turística, te la encuentras vacía, contribuyendo a tus sensaciones melancólicas y reforzando el hecho de que algo nuevo va a comenzar.
Es curioso el mes de agosto, el mes más vaivén de todos los meses, con un pico de euforia y otro introspectivo, antes de ponerse definitivamente las pilas en septiembre. Cada año, por estas fechas, toca sacar la libreta, hacer balance y preparar el futuro, lo que en diciembre se llama hacer propósitos para el siguiente año. Así que, aunque suene raro, feliz final de agosto a todos y próspero año nuevo.
Y, por supuesto: feliz lunes y que tengáis una gran semana.