Cox Energy se ha mostrado «lista para comenzar una nueva etapa» en la historia de Abengoa, tras haber sido adjudicataria de las filiales productivas de la compañía, «impulsando su crecimiento para volver a ser una empresa líder en el desarrollo tecnológico para la generación de energías limpias», y ha insistido en mantener el compromiso «a largo plazo» con Andalucía, según ha señalado su presidente, Enrique Riquelme.
El empresario es el fundador de la compañía española solar fotovoltaica que inició su actividad en 2014 y ahora cuenta con oficinas y proyectos en México, Chile, Panamá, Colombia y España.
Su actividad está dividida en tres áreas: generación de energía, comercialización de electricidad cien por cien renovable y operación y mantenimiento de plantas.
La compañía cuenta con una cartera superior a los 5.000 MWp, de los que una parte significativa está respaldada por contratos de venta de energía y el resto en diferentes fases de desarrollo y listos para próximos PPAs, públicos y privados.
Cuatro años antes, en 2010, Riquelme constituyó Panamá Grupo El Sol, con divisiones de energía, áridos y cemento. La sociedad alcanzó importantes hitos como el suministro de arena para la obra de ampliación del Canal de Panamá.
Además, el directivo lideró en 2012 el desarrollo de una planta fotovoltaica de 56 MW en Guatemala, Rainbow 50, entre la más importante de Latinoamérica.
La actividad empresarial del presidente de Cox Energy siempre ha estado unida al compromiso social y el apoyo al talento. Tanto a título personal como a través de sus empresas, apoya e impulsa proyectos centrados en causas sociales y medio ambiente.