Starbucks ha elegido a Laxman Narasimhan como su futuro consejero delegado, sustituyendo así a Howard Schultz, que el año pasado asumió el cargo de forma interina hasta encontrar un candidato definitivo para el puesto
El jueves, la empresa británica Reckitt Benckiser informó de que Narasimhan había decidido dejar su posición de CEO en la firma para trasladarse a Estados Unidos por motivos personales y familiares tras haber recibido una oferta de empleo.
Narasimhan asumirá sus responsabilidades en la cadena de cafeterías el uno de octubre, aunque trabajará junto con Schultz al menos hasta el uno de abril de 2023, cuando pasará a ser consejero delegado con funciones plenas.
«Laxman es un líder inspirador. Su profunda experiencia directa liderando transformaciones estratégicas en empresas globales de consumo le hacen el candidato ideal para acelerar el crecimiento de Starbucks y aprovechar las oportunidades frente a nosotros», ha subrayado la presidenta del consejo de administración de Starbucks, Mellody Hobson.
Hasta asumir por completo su cargo, Narasimhan pasará tiempo tanto con Schultz como con el resto del equipo gestor, los socios y los clientes para exponerse a la marca y la cultura de la empresa. También visitará tiendas, fábricas y plantaciones de café.
Antes de ser consejero delegado de Reckitt Benckiser, Narasimhan ocupó varios puestos de responsabilidad en PepsiCo, incluyendo el de responsable global comercial. Con anterioridad, fue socio senior de McKinsey & Company.
Lidiar con el movimiento sindical
Uno de los principales retos del nuevo consejero delegado de Starbucks será lidiar con el movimiento sindical de la empresa. A diferencia de en España, en Estados Unidos los empleados de cada centro de trabajo deben votar si delegan en un sindicato las labores de representación laboral, siendo así una decisión colectiva y no individual.
En diciembre, Starbucks no contaba con ninguna de sus cerca de 9.000 tiendas propias sindicalizada. Según los datos de la sección de Starbucks del sindicato Workers United, a 30 de agosto había 230 tiendas sindicalizadas y otras 320 habían iniciado los trámites para celebrar elecciones sindicales.
En mayo, la empresa anunció subidas de sueldos de entre el 7% y el 10% para los empleados de sus tiendas. Sin embargo, estas mejoras salariales únicamente se aplicarían a aquellos locales que no hubieran votado sindicalizarse o hubieran iniciado un proceso electoral para ello.