El USS Pierre (LCS-38) es el último buque de combate litoral de la clase Independence de la Armada estadounidense. Con 127 metros de eslora y 31 de manga, destaca por su casco trimarán de aluminio, lo que le brinda una estabilidad y velocidad poco frecuentes, superando con comodidad los 40 nudos, además de permitirle operar en aguas extremadamente poco profundas, algo inusual para buques de guerra de este tamaño.
Su autonomía se cifra en más de 4.000 millas náuticas (unos 7.400 kilómetros) y está designado para completar misiones en seguridad marítima, guerra antisubmarina, antisuperficie, neutralización de minas y apoyo humanitario. El Pierre está dotado con un cañón Mk 110 de 57 mm, defensas antiaéreas SeaRAM y sistemas de radar y combate en red, además de capacidad para operar con helicópteros MH-60 Seahawk, drones y vehículos no tripulados. Su tripulación base esta compuesta por 40 marinos, aunque puede ampliarse según la misión asignada.
Un elemento clave para la defensa del Pierre es el sistema SeaRAM, que utiliza misiles guiados para interceptar amenazas aéreas y misiles antibuque en trayectorias próximas, con un alcance efectivo aproximado de 8 a 9 kilómetros. Esta habilidad convierte al Pierre en un buque perfecto para la defensa cercana en zonas litorales y combate contra ataques repentinos, aunque no está configurado de fábrica para la proyección de misiles de largo alcance como ocurre en plataformas mayores de la US Navy.
Más allá del aspecto técnico, el Pierre ha sido evaluado con rigurosidad en pruebas extremas bajo supervisión militar y civil, e incorpora sistemas no tripulados enormemente innovadores para minimizar riesgos a la tripulación. Otra característica muy llamativas es su enorme cubierta de vuelo, una de las más amplias de cualquier buque de superficie estadounidense por detrás de portaaviones y buques anfibios.