La presentación del SHE —abreviatura de Sanlorenzo Heritage— ha cautivado mi imaginación (¡y quizá hasta mi corazón!) porque es fresca, innovadora y rinde homenaje al pasado con todas las comodidades y la tecnología actuales, a diferencia de cualquier otro yate que haya visto últimamente. Según el equipo de comunicación de Sanlorenzo, «El SHE no es el inicio de una gama, sino una expresión única del legado náutico, reimaginada por el talentoso equipo de artesanos y diseñadores de Sanlorenzo, en estrecha colaboración con la inspiración arquitectónica contemporánea de Zuccon International Project y Lissoni & Partners.
Pero creo que Massimo Perotti, presidente y director ejecutivo del Grupo Sanlorenzo, lo expresa aún mejor.
“El SHE es una celebración del arte de la náutica italiana”, afirma. “El SHE representa un viaje de siete décadas. Un yate que refleja todo en lo que creemos: elegancia discreta, innovación respetuosa y un diseño perdurable. La botadura del SHE durante el vigésimo aniversario de mi gestión al frente de Sanlorenzo tiene un profundo significado. El SHE es un puente entre nuestra herencia y nuestro futuro”.
Es una idea genial. Y como pueden ver, las líneas exteriores del SHE evocan el espíritu y la elegancia de los años 60. «El SHE está diseñado para entendidos que aprecian la elegancia atemporal y la pureza de las formas», afirma Tommaso Vincenzi, CEO de Sanlorenzo. «Un homenaje a la belleza y la tradición, donde cada detalle refleja nuestra visión de una forma contemporánea y consciente de experimentar el mar».
«El SHE no es solo un yate; es memoria en movimiento», declara Bernardo Zuccon, de Zuccon International Project. «Es el resultado de un proceso de diseño arraigado en la tradición de la construcción naval italiana, definida por la artesanía, la cultura y la sensibilidad estética, y que, con respeto, se abre a nuevas visiones. Cada línea, cada volumen del SHE nace del deseo de reinterpretar las formas y proporciones que marcaron una época, dotándolas de un lenguaje contemporáneo».
En lo que podría ser la combinación definitiva de lo clásico y lo moderno, la popa se abre para revelar una auténtica terraza a nivel del agua, al estilo de un club de playa. La cubierta principal se encuentra en un solo nivel. La bañera es espaciosa y adaptable. Incluso la cubierta está revestida con una reinterpretación sintética sostenible de la teca natural (elegida por su mínimo mantenimiento y su capacidad para reducir la temperatura superficial entre 3 y 4 °C) sin sacrificar la elegancia atemporal de la teca.
“El SHE es un yate elegante”, añade Piero Lissoni de Lissoni & Partners. “Reutiliza elementos tradicionales y evoca la gracia de los años 60, pero con una visión de futuro. Es un yate moderno con numerosas innovaciones, expresadas con sencillez a través de una estética refinada”.
El SHE también marca un nuevo capítulo en la trayectoria de Sanlorenzo hacia la innovación sostenible, convirtiéndose en el primer yate de la flota en integrar el sistema de propulsión híbrido IPS de Volvo Penta: una solución de doble energía que combina la energía eléctrica y diésel. Equipado con dos unidades IPS30 (2 x 1000 CV), el SHE garantiza una velocidad de crucero de hasta 20 nudos en modo híbrido. En modo totalmente eléctrico, el yate puede navegar silenciosamente hasta 9 nudos.
Bonito. Muy bonito.