El Monte Real Club de Yates de Baiona ha sido el escenario un año más de la prestigiosa entrega de los Premios Nacionales de Vela Terras Gauda 2025. Organizados en el marco del 40º Trofeo Príncipe de Asturias, estos galardones reconocen la excelencia y el esfuerzo en la vela española, y reúnen a destacados deportistas, autoridades y figuras clave del mundo náutico en una velada emotiva y cargada de significados.
Entre los galardonados brillaron nombres emblemáticos como Álex Pella, quien recibió su cuarto Premio Nacional de Vela siendo reconocido como el mejor regatista oceánico. En su ausencia, sus padres recogieron el trofeo ante una ovación calurosa. También destacaron Jordi Xammar y Marta Cardona, campeones mundiales y europeos en la clase 470 mixto, premiados como el mejor equipo preolímpico, símbolo del esfuerzo y la proyección de la vela olímpica española. En el apartado de monotipos, el grancanario Javier Padrón fue distinguido como mejor patrón de la temporada tras sumar su tercer título mundial consecutivo en J80, agradeciendo el premio a los armadores y equipos con quienes ha compartido su trayectoria.
Asimismo, la gala premió la comunicación en la vela con el galardón Mariano Aguado al Sail In Festival, certamen que fomenta la cultura de la vela a través del cine y la divulgación, y homenajeó la carrera deportiva del campeón olímpico Fernando Echávarri, un referente de la vela española con más de tres décadas en la élite. La ceremonia contó con la presencia de autoridades destacadas como el presidente del Monte Real, José Luis Álvarez; José María Fonseca Moretón, presidente de Bodegas Terras Gauda —patrocinador principal de los premios—; representantes de la Xunta de Galicia, la Diputación de Pontevedra y el Concello de Baiona, entre otros.
Los trofeos entregados fueron reproducciones del mástil de señales del Monte Real Club de Yates, en honor a Rafael Olmedo Limeses, ex presidente del club, simbolizando los valores humanos y deportivos que sustentan estos premios. La noche concluyó con fuegos artificiales en la bahía de Baiona y una fiesta que celebró la familia de la vela española, consolidando la importancia de Galicia como epicentro de este deporte en el país.
Este reconocimiento anual no solo premia el talento y los logros deportivos, sino que también ensalza el compromiso con los valores de la vela y el impulso social y cultural de esta disciplina en España, reafirmando al Monte Real Club de Yates como un referente de la náutica nacional.
