Michelle Obama se encuentra nuevamente en Mallorca disfrutando de sus vacaciones de verano junto a sus hijas, Sasha y Malia. Desde su primera visita en 2010, la isla se ha convertido en su destino habitual, y en esta ocasión se alojan en la finca del exembajador de EE. UU. en España, James Costos, en Llubí. Allí llevan una vida discreta, lejos del foco mediático, aunque han sido vistas recientemente en un restaurante en Puerto Portals y nada menos que a bordo del yate del director de cine Steven Spielberg y su esposa, Kate Capshaw.
Este momento ha sido uno de los más virales del viaje, en el que ambas familias han compartido una jornada muy agradable surcando las olas mallorquinas del timón del espectacular yate del director, el Seven Seas. Este lujoso barco, valorado en más de 250 millones de dólares, está equipado con helipuerto, piscina en cubierta y siete habitaciones de lujo. Las imágenes del paseo fueron captadas por el programa ‘TardeAR’, donde se les vio desembarcando para ir a almorzar.
Las Obama aterrizaron el 19 de junio y por su parte, los Spielberg aterrizaron en Mallorca el día 17 y también se alojan en la isla con motivo de unas vacaciones. Antes de su encuentro con Michelle Obama, el director pasó varios días en el área del Port d’Andratx junto al actor Daniel Day-Lewis, amigo personal del cineasta.
La ausencia de Barack Obama ha acentuado los rumores sobre una posible crisis en su matrimonio, aunque según la periodista Leticia Requejo, los paparazzis que vigilan la zona no descartan que el expresidente estuviera en el yate sin dejarse ver. Además, recordó que Barack desmintió tales rumores en una entrevista previa, sin confirmar ni negar su presencia en la isla.
Pese a las especulaciones, lo cierto es que Michelle continúa fiel a su refugio mediterráneo, rodeada de amistades y disfrutando de momentos inolvidables como este encuentro con Spielberg. El viaje reafirma el fuerte vínculo que la exprimera dama mantiene con Mallorca, consolidado a lo largo de casi tres lustros de veranos en la isla.
