La élite sigue embarcando en Ibiza. Esta vez, se trata del dueño de Synthesis, un superyate de 74 metros de eslora cuyo valor se estima en 100 millones de dólares. Su nombre es Mark Scheinberg y es el cofundador de la plataforma de póker online PokerStars, éxito que le ha llevado a colarse en la lista de las 600 personas más ricas del mundo.
La llegada de esta fusión de ingeniería de alto nivel y exclusividad no ha pasado desapercibida en la isla ibicenca. El Synthesis es uno de los buques más lujosos del mundo, un modelo Amels 242 de la gama de ediciones limitadas. Cuenta con una cubierta con jacuzzi en la proa y dispone de una capacidad para 12 invitados, con 19 personas de tripulación.
Asimismo, está equipado con todo tipo de lujos: cuenta con gimnasio, jacuzzi en cubierta, club de playa, sauna, salón de belleza, wifi, aire acondicionado e incluso iluminación subacuática. Fabricado con casco de acero y una superestructura de aluminio, rematada con cubiertas de teca, su mantenimiento anual alcanza los 10 millones.
Scheinberg es un empresario nacido en Israel en 1973, que se trasladó a Canadá siendo adolescente. Su salto a la fama llegó en 2001, cuando, con solo 28 años, fundó junto a su padre la plataforma de póker online PokerStars. Isai Scheinberg, ingeniero informático de IBM, fue clave en el desarrollo técnico del proyecto. En sus primeros años, la empresa operaba desde la Isla de Man, territorio conocido por sus ventajas fiscales.
No obstante, su expansión internacional encontró obstáculos. En 2011, el gobierno estadounidense presentó cargos contra PokerStars por operar sin licencia federal, una situación que desembocó en el arresto del padre en Nueva York en 2020. A pesar de estos reveses, en 2014 Mark vendió PokerStars por 4.900 millones de dólares y redirigió su carrera hacia el sector inmobiliario de alto nivel. Desde entonces, ha reforzado su fortuna mediante inversiones como la adquisición del 50% del Centro Canalejas de Madrid a través de su firma Mohari Hospitality.
A comienzos de 2025, la revista Forbes estimaba su patrimonio en 5.600 millones de dólares. No obstante, su éxito empresarial contrasta con su vida personal: a sus 52 años, se le sigue considerando un «soltero de oro», sin pareja conocida. Con su yate surcando las aguas cristalinas de Ibiza, Mark Scheinberg simboliza un perfil cada vez más común entre la élite tecnológica: ambicioso, dueño de su imperio y amante del lujo náutico.