Hace menos de dos meses, contábamos desde Nautik que el trimarán SP80 pretendía superar la velocidad histórica de los 54 nudos (62,1 mph, 100 km/h), sin embargo, hoy confirmamos que lo han logrado y con creces. La semana pasada alcanzó una velocidad que supera la barrera de los 100 km/h, llegando a los 108 km/h (67,1 mph). Esto lo convierte en el segundo velero más rápido registrado, aunque el equipo suizo sigue con la ambición de superar el récord mundial establecido en 2009 por Paul Larsen a bordo del Vestas Sailrocket II, que logró una media de 75,31 mph en 500 metros.
Este hito pone al kiteboat SP80 por encima de las velocidades máximas registradas por algunos de los veleros de competición más famosos, como el AC75 de la Copa América y los catamaranes F50 de SailGP, que alcanzaron velocidades cercanas a los 64 mph. No obstante, mientras estos barcos compiten en circuitos estrechos y en grupo, el SP80 está diseñado para velocidad máxima en línea recta, buscando la perfección en la resistencia y el control.
El equipo, formado por jóvenes con una media de edad de 23 años, analiza cada dato desde su base en Lecaute, Francia, y prepara nuevas salidas cuando las condiciones meteorológicas son ideales. Su objetivo es mantener estas altas velocidades durante más de 500 metros, la distancia exigida para validar un récord mundial oficial.
El secreto a altas velocidades
La coordinación entre los dos pilotos es crucial: uno controla el kite, que genera la fuerza de propulsión, mientras el otro dirige el barco, manejando la precisión y estabilidad. A estas velocidades, las fuerzas que actúan sobre la embarcación y el kite son extremas, y un error podría significar la destrucción del ligero y sofisticado casco de fibra de carbono. El piloto Benoît Gaudiot, quien también ayudó a diseñar el SP80, es el actual récord de velocidad en kitesurf para menores de 18 años.
A pesar de haber logrado superar los 100 km/h, el equipo sabe que aún deben aumentar la velocidad en más de 18 mph para batir el récord mundial. Para ello, el kiteboat tendrá que alcanzar entre 98 y 103 mph durante su intento definitivo. Los próximos meses de competición y pruebas se desarrollarán en la región francesa de Occitania, donde esperan seguir desafiando los límites de la velocidad sobre el agua.