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El Salón Náutico de Barcelona desvela su Plan Estratégico 2025-2028

Luis Conde, presidente del evento, tiene muy clara la consigna: «El cambio de época es brutal; hay que impulsar las ventas de barcos».

Josep Antonio Llopart, Luis Conde y Jordi Carrasco, en el encuentro informativo.

El Salón Náutico de Barcelona regresa al primer plano de la actualidad con las pilas totalmente cargadas. Después de un año de transición en el que tuvieron que suspender el evento por la imposibilidad de compatibilizarlo con la Copa América en la capital condal, los máximos responsables del Salón han desvelado el Plan Estratégico para los próximos tres años con una consigna muy clara: impulsar la venta de embarcaciones.

La presentación del Plan Estratégico 2025-2028 estuvo en manos de Luis Conde, presidente del Salón Náutico, Josep Antoni Llopart, director del evento y Jordi Carrasco, director general de la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN), promotora del evento organizado por Fira Barcelona. Los tres apuestan por un modelo basado en una pata de negocios (el Salón propiamente dicho, que se llevará a cabo entre el 8 y el 12 de octubre en el Port Vell de Barcelona) y una pata recreativa, un festival náutico para toda la familia que, aún sin fecha concreta, tendrá lugar en la primavera del 2026 para impulsar el conocimiento del mar, incentivar la práctica de actividades náuticas y dar espacio a cientos de negocios de productos y servicios asociados con la recreación y la diversión marina. Pero los negocios, las ventas de barcos, serán el terreno propio del Salón Náutico de cada otoño en la ciudad condal.

«El cambio de época es brutal: o cambiábamos el Salón Náutico o nos íbamos cada vez más abajo», afirma gráficamente Luis Conde en el inicio de la conferencia de lanzamiento de la próxima edición del evento. «España tiene unas 200.000 embarcaciones con un promedio de edad de 30 años. Eso significa que hay que impulsar las ventas de barcos. Y para eso está el Salón Náutico», resume el presidente del Salón. 

Barcelona busca así para la edición 2025 tener más barcos, más esloras y más jugadores de primera línea (los grandes astilleros internacionales y no sólo los distribuidores locales). Ese es el punto de partida, la oferta de yates y veleros de última generación y de envergadura. El segundo paso es crear un ambiente que haga irresistible la voluntad de comprar, y allí aparecen los programas de embajadores, el plan de hosted buyers que invitará a un total de 50 grandes compradores internacionales y áreas VIP de gastronomía y networking para transformar al Salón Náutico en un espacio de negocios y ventas reales. 

El Salón Náutico de Barcelona es actualmente el cuarto de Europa, con un gran punto a favor y diferencial: su ubicación, en el fantástico puerto barcelonés. Pero el podio está en manos del salón náutico que más negocio mueve (Dusseldorf), el de Génova, que se destaca por la potencia de los diseños italianos y el de Cannes, que reina en el mundo de la vela. Está claro que para alcanzar al podio no basta con una buena localización, hay que generar más negocios. Ese el core del nuevo Salón Náutico en la era post Copa América.

«Revisamos la ecuación de negocios del Salón, por eso vamos a centrarnos en la compra de embarcaciones y no tanto en el aspecto divulgativo», indica Josep Antoni Llopart, el ejecutivo que debe transformar esas ideas en realidad, comenzando por atraer a los grandes astilleros y las grandes marcas de la náutica mundial al evento de octubre. Aún no tienen nombres confirmados, pero los prometieron para finales de abril.

«Sabíamos que el Salón Náutico había perdido relevancia, por ese este nuevo plan estratégico es el medio para crecer en embarcaciones, en gama y en compradores. Queremos volver a ser relevantes en el espacio europeo», destaca Jordi Carrasco, director general de ANEN, la patronal del sector de la náutica de recreo.

La apuesta por ese doble escenario (Salón Náutico para generar negocios y Festival Náutico para conectar la gente con el mar y los deportes náuticos) es un objetivo tan ambicioso como atractivo, que si resulta exitoso promete un horizonte de competencia agresiva con los demás salones náuticos europeos. A por el podio.

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