Cantiere delle Marche (CdM) lleva el lujo náutico a nuevas alturas con su último proyecto: un yate explorador de 50 metros de eslora y equipado con una pista de pickleball de tamaño completo en su cubierta. Este exclusivo yate, que está construyendo a petición de un cliente estadounidense, es el segundo modelo Flexplorer 165 vendido por CdM, y ha sido personalizado para satisfacer todas las exigencias del propietario, lo que lo convierte en una verdadera joya única en su clase.
Diseñado con un exterior vanguardista de HydroTec y un interior sofisticado de Design Unlimited, este yate presenta numerosas modificaciones estructurales que lo distinguen del modelo original. Una de las más notables es la ampliación del voladizo de la cubierta superior, que ahora alberga la pista de pickleball rodeada por una ligera estructura de fibra de carbono y redes para evitar que las pelotas caigan al mar. Los espectadores pueden disfrutar de los partidos desde cómodas zonas de observación, tanto junto a la pista como desde el solárium.
La extensión de la cubierta superior también proporciona una amplia sombra en la cubierta principal inferior, espacio que se ha aprovechado para acomodar una embarcación auxiliar de 7 metros y un par de motos acuáticas. Mediante un puente grúa, estas embarcaciones pueden ser desplegadas rápidamente, transformando el área en un lujoso salón exterior con bar, piscina climatizada y baluartes abatibles. Además, la cubierta superior cuenta con otra embarcación auxiliar de algo menos de 5 metros, dos motos acuáticas adicionales y un helicóptero Airbus H130. El yate también ofrece generosos espacios de almacenamiento para otros equipos recreativos que el propietario desee utilizar tanto en el agua como en tierra.
El interior del Flexplorer 165 no se queda atrás en términos de lujo y comodidad. Un ascensor conecta las cubiertas inferior, principal y superior, facilitando el acceso a todas las áreas del yate. La cubierta inferior alberga cuatro camarotes para invitados, mientras que la suite del armador se encuentra en una posición privilegiada en la cubierta principal. La tripulación tiene a su disposición cinco camarotes y el capitán cuenta con su propio camarote privado. En cuanto a las instalaciones de bienestar, el yate incluye un gimnasio y una zona de masajes en la cubierta superior, además de una área de terapia termal con sauna y baño de hielo.
En términos de rendimiento, el Flexplorer 165 está equipado con dos motores Caterpillar C32 ACERT, que le permiten alcanzar una velocidad máxima de 15 nudos y una autonomía de 4,800 millas náuticas a una velocidad de crucero de 10 nudos.
CdM ha demostrado, una vez más, su capacidad para ir más allá de las expectativas, ofreciendo un yate que combina lujo, innovación y personalización al máximo nivel.