Norwegian Cruise Line ha presentado su nueva estrategia a largo plazo con la que tiene previsto ampliar su flota, así como desarrollar aún más su isla privada. El plan incluye barcos de nueva generación para Norwegian Cruise Line, Oceania Cruises y Regent Seven Seas Cruises, que serán construidos por Fincantieri, junto con mejoras de infraestructura para Great Stirrup Cay, la isla privada de la compañía en las Islas Bahamas.
La compañía ha anunciado el proyecto de nuevas construcciones más completo de su historia un total de ocho barcos de última generación, que representan casi 25.000 amarres adicionales, con nuevas clases de barcos para cada una de sus tres marcas y la construcción de un muelle multi crucero en Great Stirrup Cay, la isla privada de la que dispone la compañía en las Bahamas.
La entrega de los nuevos barcos de las tres marcas está prevista en un periodo de diez años, entre 2026 y 2036.
Tras la entrega de cuatro barcos de la clase Prima-Plus entre 2025 y 2028, se espera que Norwegian Cruise Line reciba cuatro barcos de aproximadamente 200.000 toneladas brutas, cada uno con una capacidad de casi 5.000 huéspedes, en 2030, 2032, 2034 y 2036, sujetos a financiación.
Norwegian Cruise Line Holdings espera que el proyecto de estos cuatro cruceros de Norwegian Cruise Line (NCL) sustituya a otro pedido de dos cruceros para Oceania Cruises, realizado inicialmente para asegurar la disponibilidad con el astillero. El pedido de los cuatro cruceros para NCL aún se está ultimando y está sujeto a financiación.
La entrega del segundo crucero de Oceania Cruises está prevista contractualmente para el cuarto trimestre de 2028, pero podría retrasarse hasta 2029. Todas las fechas de entrega previstas son aproximadas y están sujetas a cambios, según explicó la compañía.
Dos barcos para Oceania Cruises
Basándose en el éxito de sus barcos de la clase Allura, el último de los cuales se entregará en 2025, Oceania Cruises también tiene prevista la entrega de dos barcos de 86.000 toneladas brutas, cada uno con capacidad para 1.400 huéspedes, en 2027 y 2029.
Por último, Regent Seven Seas Cruises tiene prevista la entrega de dos barcos de 77.000 toneladas brutas, con capacidad para 850 pasajeros cada uno, en 2026 y 2029.
En los próximos meses se darán a conocer detalles sobre las comodidades, camarotes, restauración, recreación, eficiencia, sostenibilidad y otras características de los barcos.
«Este pedido estratégico de nuevos barcos supone la introducción constante de barcos de última generación en nuestra flota y consolida nuestro crecimiento a largo plazo. También nos permite aprovechar significativamente nuestra escala operativa, fortalecer nuestro compromiso con la innovación y mejorar nuestra capacidad para ofrecer a nuestros huéspedes nuevos productos y experiencias, al tiempo que proporciona oportunidades para mejorar la eficiencia de nuestra flota», explica el presidente de Norwegian Cruise Line Holdings, Harry Sommer.
Más sostenibles
En colaboración con el astillero italiano Fincantieri, cada marca diseñará su nueva clase de barcos y se centrará en crear los barcos más grandes, eficientes e innovadores de sus respectivas flotas. En consonancia con los esfuerzos de sostenibilidad de la empresa, se espera que los nuevos proyectos contribuyan a la reducción de las emisiones de carbono.
La Compañía ha obtenido financiación de crédito a la exportación con condiciones favorables para financiar el 80% del precio contractual de cada uno de los dos barcos de Oceania Cruises y Regent Seven Seas Cruises, sujeto a ciertas condiciones. Los pedidos de barcos para Norwegian Cruise Line siguen sujetos a financiación, y se encuentran actualmente en curso.
Nuevo muelle en su isla privada
Está previsto que el nuevo muelle de la isla privada de la empresa en las Bahamas, Great Stirrup Cay, comience a construirse en el verano de 2024 y esté terminado a finales de 2025, con una inversión aproximada de 150 millones de dólares (138 millones de euros).
El nuevo muelle se construirá para dar cabida simultáneamente a dos grandes barcos de las clases actuales y futuras de la compañía.
El desarrollo del muelle mejorará la experiencia de los huéspedes en Great Stirrup Cay y, junto con Harvest Caye, la isla privada de la Compañía en Belice, continuará ofreciendo a los huéspedes destinos en el Caribe Oriental y Occidental.