La NASA ha lanzado con éxito su misión satelital destinada a estudiar la salud de los océanos, la calidad del aire y los efectos del cambio climático en beneficio de la humanidad. El satélite, denominado PACE (Plancton, Aerosoles, Clima y Ecosistemas Oceánicos), despegó a las 1:33 a.m. EST del jueves desde el Complejo de Lanzamiento Espacial 40 de la Estación Espacial de Cabo Cañaveral, en Florida, a bordo de un cohete SpaceX Falcon 9.
El objetivo principal de PACE es analizar desde cientos de kilómetros sobre la Tierra el impacto de elementos diminutos pero cruciales, como la vida microscópica en el agua y las partículas microscópicas en el aire. Equipado con un instrumento hiperespectral de color oceánico, permitirá medir los océanos y otras masas de agua a través de un espectro de luz ultravioleta, visible e infrarroja cercana. Esta capacidad permitirá rastrear la distribución del fitoplancton y proporcionar una visión global y diaria de las comunidades de estos organismos, lo que beneficiará la gestión de recursos costeros y la predicción de la salud de las pesquerías.
Además, PACE transporta dos instrumentos polarímetros que detectarán cómo interactúa la luz solar con las partículas de la atmósfera, proporcionando nueva información sobre los aerosoles atmosféricos, las propiedades de las nubes y la calidad del aire a diferentes escalas. Estos datos serán cruciales para comprender las interacciones entre el océano y la atmósfera, especialmente en un contexto de cambio climático.
Karen St. Germain, directora de la División de Ciencias de la Tierra de la NASA, destacó que la misión PACE avanzará significativamente en el conocimiento del papel del océano en el ciclo climático, mientras que Marjorie Haskell, ejecutiva del programa PACE, elogió la dedicación del equipo en superar desafíos, incluida la pandemia mundial.
Con esta nueva herramienta, los investigadores podrán estudiar los efectos del cambio climático en el fitoplancton, organismos fundamentales en el ciclo global del carbono y en el mantenimiento de ecosistemas acuáticos vitales para la seguridad alimentaria y la economía.
La misión PACE representa un hito en la investigación científica sobre el medio ambiente y promete proporcionar datos valiosos para comprender y abordar los desafíos del cambio climático en los océanos y la atmósfera terrestre.