Nautik Magazine

Cuaderno de Bitácora | Capitán Salmón, 21 de noviembre

Pablo Alzugaray es navegante y una de las personas más creativas en el mundo de los negocios. Ahora, escribe para Forbes Nautik su particular ‘Cuaderno de Bitácora’ mientras cruza el Atlántico
Foto: Leopoldo (el Mono) Rissotto

Ayer fue un día de navegación gloriosa y hoy ha empezado mejor aún…

La realidad se bate con el parte y los alisios se asoman prestos para soplar. Ayer suaves, entre 12 y 20 kts y, desde esta mañana, con más garra, entre 20 y 30, con puntas de 35. Han rolado de norte a este, y del este al sudeste, con rachas de sur. 

Navegamos de popa, con vientos portantes y nuestra mayor retenida con una portuguesa que, tras doblar la proa por cornamusa, se hace firme en uno de los winches a pie del palo. 

En proa hemos estado todo el día, incluyendo su noche, trimando y combinando todo lo que llevamos. Trinqueta, génova, un código 0 que subimos y bajamos ya con cierta soltura y un spinaker asimétrico para cuando se cierra en popa y afloja.  Estoy convencido de que si en lugar de llevar estas cinco velas, llevásemos cincuenta, Iñaki ya las habría probado todas.

El Amibola navega desenvuelto. Nunca por debajo de 10 kts, a una media de 11, y con puntas por encima de los 13.

Las olas del Atlántico son diferentes a las del Mediterráneo y las de los alisios distintas a las demás. Las ves llegar desde lejos, y sientes que se van entre intervalos infinitos. Se muestras tranquilas, incluso afables, pero imponen el mismo respeto que cualquier otro ser gigantesco.

Nuestra salida de Lanzarote, el domingo por la mañana, coincidió con la de la Regata ARC 2023, con largada en Las Palmas y llegada en St Lucia. Lo que es decir que, hace 48 horas, más de 200 veleros zarparon 100 millas delante de nosotros, para hacer un recorrido similar. 

El Amibola no es parte oficial de la contienda, porque cuando decidimos este viaje ya no cabíamos, pero los hechos, inexorables, nos conceden un espacio. Al escribir estas líneas ya hemos dado alcance al grueso de su flota.

No competimos, pero ¿por qué negarlo? nos esforzamos por ser competentes.

Cada vez que nos acercamos a otra popa Matías grita: Un solo barco navega…” ya lo que los demás respondemos  “…pero dos, compiten”.

Un abrazo desde 24º 12.266 N · 19º 18.053 O, el mejor lugar del mundo para estar hoy. 

Capitán Salmón

Socio-cofundador de la agencia de marketing Ernest