Arabia Saudí acordó en 2022 con España la compra de cinco corbetas al grupo Navantia por un valor estimado de 2.000 millones de euros. Fue hace diez meses, y desde entonces no se ha materializado, y preocupa la coincidencia temporal con la compra por parte de Saudi Telecom del 9,9% de las acciones de Telefónica, como publica El Mundo.
La construcción de esas cinco corbetas tiene una gran importancia para la compañía estatal española. Es clave de cara al plan estratégico de los próximos cuatro años en Navantia y con él, la compañía incorporar al trabajo a 1.500 personas en la humilde bahía de Cádiz.
Todo ello se estampó en un acuerdo, el Memorando de Entendimiento, firmado entre España y Arabia Saudí a finales de 2022. El Gobierno ya enarboló este acuerdo como uno de sus grandes éxitos y ahora se trata, por tanto, de un elemento de presión para que autoricen a STC la compra de acciones.
Y es que, el Gobierno ahora tiene tiene tres meses para autorizarla, justo el período de tiempo en el Arabia Saudí tiene que pronunciarse afirmativamente sobre el contrato con Navantia para que el proyecto pueda incorporarse en los planes del 2024.
Coincide también que el principal firmante del acuerdo entre España y Arabia Saudí es Khaled bin Hussein Al-Bayari, actual viceministro de Defensa de Arabia Saudí, que es a su vez un miembro influyente del consejo de administración y de la comisión ejecutiva de STC. También es consejero del Saudi Arabian Military Industries con quien Navantia ha formado una sociedad mixta.
A su vez, el principe heredero Mohamed Bin Salman, además de ser el primer ministro, es el presdiente del consejo de administración del fondo que controla STC, el fondo soberano PIF. Un situación que dificulta que se cumplan la intención de la parte morada del Gobierno de que la sociedad saudí solo controle el 5% de Telefónica.