El grupo empresarial francés de lujo LVMH ha anunciado que ha adquirido el 50% de las acciones y el derecho de distribución mundial del champán Armand de Brignac, propiedad del rapero Jay-Z.
LVMH nació de la fusión de dos de las marcas más exclusivas: Louis Vuitton y la destilería Moët Hennessy, gracias a la cual se ha completado este negocio.
“Hace tiempo que admiramos el éxito de Armand de Brignac y hoy estamos orgullosos de asociarnos a ellos”, declaró el consejero delegado de Moët Hennessy, Philippe Schaus, en el comunicado que ha emitido la compañía.
Por su parte, el cantante estadounidense afirmó en el mismo comunicado que confía en que “el poder absoluto del marco de distribución de Moët Hennessy, la solidez de su cartera incomparable y su historial en el desarrollo de marcas de lujo le darán a Armand de Brignac el poder comercial que necesita para crecer aún más”.
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Esta bebida nació en 2006 como una apuesta de la casa Cattier para hacer un producto gourmet. En el año 2014 el músico decidió hacerse con la marca. Una unión que tuvo buenos resultados ya que, según el comunicado difundido por el conglomerado, el Armand de Brignac ha experimentado un notable crecimiento, hasta alcanzar la cifra de 500.000 botellas vendidas en 2019.
Entre los 300 y 7.000 euros
El catálogo ofrece una gran variedad de bebidas cuyos precios oscilan entre los 300 y los 7.000 euros.
Por su parte, la estructura del negocio está dividida a partes iguales. Esto supone, según los implicados, la posibilidad de que cada socio pueda “aportar sus fortalezas para asegurar el éxito del proyecto”.
Pese a estos buenos datos –y como casi todos los negocios– el sector del champán se ha visto muy perjudicado debido a la crisis provocada por la pandemia de Covid-19. Según la Federación francesa las ventas han disminuido un 17% en 2020.