El Journal of Epidemiology and Community Health ha publicado recientemente un estudio que relaciona directamente las compras con la esperanza de vida. El estudio en cuestión concluye que las personas de edad avanzada que salen a comprar cada día tienen una tasa mayor de supervivencia que aquellos que no realizan diariamente esta práctica.

De hecho, el estudio ha calculado una tasa exacta de supervivencia. En concreto, los ancianos que van de compras todos los días tiene un 27% menos de riesgo de fallecimiento que los que compran con mucha menos frecuencia. Puede sonar escéptico, pero el estudio está basado en un gran número de variables, entre ellas los hábitos de salud y el estado financiero.

Poniendo la vista sobre el hábito de salir a la compra diariamente, nos encontramos con que alguien que puede salir a comprar todos los días es alguien que, por lo general, goza de un buen estado de salud. Por otro lado, salir a comprar suele implicar andar, luego, ejercicio físico, y éste es un hábito que beneficia a la salud.

Por último, una buena salud suele implicar una mayor esperanza de vida, por lo que ya no suena tan escéptico el resultado del estudio. Por tanto, lo que el estudio demuestra es que la actividad física diaria, en este caso el hecho de salir a la compra, que no el de comprar en sí, favorece a la salud y alarga la vida.

“Las personas mayores pueden ir a ver escaparates, comprar sus medicamentos, al banco o a caminar para hacer ejercicio, buscar compañía y evitar la soledad. El cumplimiento de estos propósitos puede generar varios beneficios para la salud”, aseguran los autores del estudio.

Además, la línea argumental del estudio concuerda con otros estudios que aseguran que las personas mayores que hacen ejercicio durante 30 minutos al día viven unos cinco años más de media, o que las personas de edad avanzada con amigos gozan de una mayor tasa de supervivencia.

“En comparación con otros tipos de actividad física en el tiempo libre como el ejercicio formal, que por lo general requiere motivación e instrucción profesional a veces, ir de compras es más fácil de realizar y mantener”, aseguran los autores del estudio. Teniendo esto en cuenta, se concluye que la actividad comercial es muy positiva para vivir más, ya que puede englobar tanto actividad física como social en un solo hábito diario.